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“En el Puerto de Pasaia poseemos la receta para innovar en el tráfico de contenedores”

Félix Garciandia tomó el pasado mes de enero las riendas del Puerto de Pasaia consciente de la delicada situación del enclave, afectado por una sensible bajada de la actividad por la pérdida de algunos tráficos estratégicos, como los siderúrgicos,  pero  al mismo tiempo plenamente convencido de sus virtudes y de su gran potencial para remontar la situación y seguir siendo el agente económico que necesitan Gipuzkoa y las empresas de su hinterland.

  • Última actualización
    14 noviembre 2018 17:42

Con un marcado perfil de    gestor y de hombre de empresa, al que acompaña también una sólida formación técnica, Garciandia entiende la gestión del puerto con criterios de empresa privada. En su objetivo por diversificar los tráficos portuarios, está concentrando gran parte de su energía en introducir al Puerto de Pasaia en el mercado del contenedor.

Para contar con una terminal de contenedores moderna y dimensionada que atraiga el interés de los operadores, Pasaia debe ofrecer  un valor añadido diferencial y un componente de innovación que la haga única. Félix Garciandia dice tener la receta para ello. Y también la ambición suficiente para sacar todo el partido a un puerto “que es el que tenemos y no otro”. 

 

Llegó en enero a la presidencia de la Autoridad Portuaria de Pasaia en un momento especialmente delicado de la institución. Todo un reto profesional y personal.

Procedo de la empresa privada, no tengo que ver con el mundo de la política y acepté la responsabilidad porquePasaia es mi pueblo y en cierto modo, confiaba en poder aportar una nueva visión desde el ámbito de la empresa privada.

 

Tráficos a la baja, un proceso judicial con la Lonja y un futuro incierto para el Puertode Pasaia.

En efecto, después de alcanzar en 2003 el máximo histórico de tráfico con 5,8 millones de toneladas, la crisis de tráficos que eran fundamentales, como los productos siderúrgicos y la chatarra, además de la desaparición del tráfico de carbón de la térmica, hizo que, de repente, la actividad del puerto sufriera una contracción brutal. Además, también influye el hecho de que la institución de la Autoridad Portuaria se encontraba en un escenario de crisis a causa del contencioso de la lonja pesquera, la tercera más grande de España en tamaño y cantidad de pescado subastado, y cuya judicialización afectó al propio personal de la Autoridad Portuaria.

 

Y centrados en el presente, ¿cómo está siendo la evolución de los tráficos portuarios y cuál es la previsión al cierre del presente ejercicio?

La previsión que tenemos es terminar el año en un volumen cercano a los 3,3 millones de toneladas. Básicamente, la distribución en cuanto a tipo de mercancías es más o menos la habitual. La mitad corresponde a productos siderúrgicos y la otra mitad a tráficos diversificados, tanto graneles sólidos  como mercancía ro-ro, principalmente automóviles, y las plataformas móviles. 

 

En lo que se refiere a la consolidación de los actuales tráficos, como por ejemplo los siderúrgicos, ¿será posible recuperar parte del terreno perdido?

Aunque no se podrá volver a los niveles anteriores hay margen de recuperación y en la chatarra podemos tener alguna sorpresa positiva porque la siderúrgica Celsa ha puesto en marcha en Baiona una nueva línea y parte de la chatarra necesaria para la planta podría llegar a Pasaia. También confío en que el tráfico de vehículos de una sorpresa positiva y siga su senda de crecimiento ya que se plantea incluso la operación con buques de mayor tamaño y eslora, pasando de los actuales 140 metros a 160 e incluso 170 metros.

 

¿Puede Pasaia acoger ese tamaño de barcos? Lo pregunto por aquel informe de PwC en el que se dudaba de la capacidad de Pasaia y se citaba a Bilbao como posible alternativa.

Aquel informe no aportaba ni un solo dato. Ahora bien, tuvo una virtud positiva para nosotros y es que desde el punto de vista político nos volvió a situar en el mapa, haciendo que el territorio de Gipuzkoa reivindicara el Puerto de Pasaia.

 

Siguiendo con los coches, ¿mira de reojo Pasaia a Bilbao y al Espigón Central, que podría servir también para acoger este tráfico en sus nuevas superficies?

El tráfico de vehículos es un punto fuerte del Puerto de Pasaia, con una terminal (Noatum UECC Terminal Pasajes) innovadora y eficiente, capaz de trabajar de manera muy productiva y con la ventaja de tener trenes que prácticamente llegan hasta el barco. Su diseño permite trabajar de forma ágil y con una productividad muy superior a la media del sector. 

Además, el operador está muy satisfecho y tiene tras él un puerto que cree en él y que le apoya. Pero estamos dispuestos a mejorar. Así, se ampliará la longitud de la estación de Adif en Lezo en 50 metros adicionales hasta alcanzar 550 metros. 

En la zona de Pasaia tendremos también cinco vías de apartado de más de 500 metros, dos de ellas de 700 metros. Tendremos una capacidad multimodal muy potente para tráficos que demanden este tipo de conexión. Y si vemos el puerto por dentro, veremos que los trenes llegan hasta el mismo muelle y que todo está conectado, lo que se reforzará aún más con el ancho de vía UIC, que hará que Pasaia sea la primera estación ferroviaria de Francia.

 

Veo casualmente tras usted una carpeta en la que en la etiqueta se lee: “Estudio del mercado logístico de la terminal intermodal de Lezo”. ¿Qué puede significar esta terminal para Pasaia? Eso sí, dentro de varios años, porque los plazos para su ejecución son muy largos...

Sí, estamos hablando de un proyecto a muy largo plazo con un escenario mínimo de 15 años. Para entonces, Pasaia habrá tenido que encontrar ya su sitio y llevar a cabo su transformación. Lo que tiene de interesante la estación intermodal de Lezo es que va a aportar superficie adicional para el puerto de cara a ampliar tráficos que tenemos ahora e incluso para facilitar que vengan grandes operadores mundiales y hagan sus transferencias en la terminal. 

Ahora bien, antes de todo eso debemos tener ese nudo ferroportuario de Pasaia y ser la primera estación francesa, permitiendo que los trenes carguen en el puerto para salir hacia sus destinos. Ese es el gran reto. Estamos haciendo estudios pero la mala suerte ha hecho que la empresa de la tuneladora que debía ejecutar la conexión ha quebrado y se calcula que no será hasta 2021 cuando pueda retomarse el proyecto de conectar Astigarraga con Francia.

 

Como pilar de la estrategia de diversificación de la Autoridad Portuaria, ¿es el tráfico de contenedores una apuesta con potencial real?

Con todas la garantías. Como se dice, antes de volar hay que despegar. Por ello, con los tráficos actuales trataremos de que mejoren su posición, lo mismo con el tráfico ro-ro, pero desde el punto de vista del contenedor hay un tema claro, que es que tenemos a escasos kilómetros de aquí áreas logísticas como Zaisa  o Lanbarren que manejan todos los años cantidades superiores a los 6 millones de toneladas por carretera, acarreando un gran problema de congestión viaria y medioambiental. Por ora parte, tenemos, el efecto de desvío que se produce hacia el Puerto de Bilbao. 

La industria guipuzcoana que exportan en contenedor se encuentra con que no tiene servicio en Pasaia y tiene que ir a Bilbao. Pero mirando datos de la Agencia Tributaria, se comprueba que las empresas con domicilio fiscal en Gipuzkoa que exportan por mar por Bilbao suman casi 2 millones de toneladas, con un valor de la mercancía de 4.000 millones de euros. Y creemos que el Puerto de Pasaia pueda dar respuesta a parte de estas mercancías que se desvían a Bilbao.

 

¿Y qué clase de respuesta deber ser esa?

Debe ser necesariamente una respuesta innovadora porque no somos el puerto al uso para una gran terminal de contenedores, por lo que la innovación será el eje central para el diseño de esta nueva terminal de contenedores. No quiero adelantar más detalles pero en un plazo de unos 6 a 8 meses vamos a tener respuesta, incluso gráfica, a esta parte. La terminal podrá tener un fondo de 70 metros que permitirá manejar sin problemas unos 50.00-60.000 contenedores de 40 pies. Habrá que establecer incentivos concretos y ver cuál es el planteamiento a adoptar. Para ello, el Puerto deberá jugar un papel muy directo tanto en el diseño como en el impulso de la terminal. Por ello, pedimos a Puertos del Estado que nos permita actuar de una manera flexible. Pero insisto en que la cuestión clave en este asunto va a estar en la innovación. Lo mismo que hicimos en los coches los vamos a hacer en los contenedores. Y tenemos la receta.

 

¿Cuál esa receta?

No puedo adelantar nada. Tenemos el esbozo pero tenemos que acotar más porque creemos que puede ser un proyecto muy interesante no solo para el Puerto de Pasaia sino también para otras instituciones. Y aquí la Diputación Foral de Gipuzkoa ejerce un liderazgo importante y contamos con ellos.

 

Para alcanzar estos objetivos hace falta una acción comercial importante, algo que Pasaia no ha hecho durante muchos años al tener unos tráficos prácticamente cautivos.

En el plan de etapas que tenemos, todo pasa primero por una fase de estabilización y respuesta a todos los retos, tanto los que tiene el puerto comercial como en relación con la ciudad. Primero viene la terminal y luego el tráfico. Cuando contemos con el diseño de la terminal se desarrollará la labor comercial de cara a contactar con todos los grandes nombres del sector y conseguir que se animen. 

Aunque no se puedan nombrar, por algunos contactos que hemos tenido con algunas grandes compañías, puedo decir que hay bastante interés. Va a ser un concepto muy, muy innovador. Como terminal automática no hay nada parecido en España.

 

¿Es la automatización entonces la clave?

En Pasaia no hay espacio. En un espacio muy reducido hay que ofrecer una productividad muy alta y trabajar de manera muy eficiente. Hoy en día eso existe. Las grandes terminales de contenedores que atienden buques de 20.000 TEUs han ido compactándose, cono el puerto surcoreano de Busan, por ejemplo. Están las transtainer automatizadas y demás equipos pero aún se puede ir más allá…

 

¿Cuánto más allá?

Ja, ja… En nuestro caso no hay opción, no nos cabe otra. Debemos tener la máxima eficiencia y eficacia respecto al espacio.

 

Garciandia cree que Pasaia puede captar parte de las mercancías contenerizadas de Gipuzkoa que salen por Bilbao. Foto J.P.