La operación consistió en el traslado de dos piezas singulares. La primera es una grúa ferroviaria, de 185 toneladas, con origen en el puerto de Hamburgo y destino a Itaqui (Brasil). Y la segunda es una pieza industrial de 173 toneladas para una fábrica papelera, con origen en el puerto de Amberes y destino a Vila do Conde (Brasil). Con los dos buques abarloados, las grúas de a bordo del primer buque trasladaron al segundo la carga, lastrando y deslastrando automáticamente su banda del lado del muelle para evitar la escora durante el izado. Se trata de una operación poco frecuente en el puerto de Ferrol, a pesar de que es un puerto especializado en cargas de proyecto, precisamente por la experiencia de los operadores de la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao y sus aguas abrigadas.