La Xunta de Galicia mantiene la obligación de registrarse sanitariamente a transportistas
Fenadismer, a través de sus organizaciones territoriales en Galicia, se reunió ayer con los responsables de Xunta de Galicia con el objetivo de analizar el impacto de la Orden de prevención por Covid-19 que se ha puesto en marcha y que obliga a los transportistas a registrarse sanitariamente cada vez que entren en la Comunidad Autónoma.
- 03 agosto 2020 01:00
- Última actualización
31 julio 2020 16:10
El pasado miércoles, 29 de julio, entró en vigor la Orden aprobada por la Xunta de Galicia por la que se establecen medidas de prevención para hacer frente a la crisis sanitaria en relación con la llegada a dicha Comunidad Autónoma de personas procedentes de otros territorios.
Como informó Fenadismer, en la citada Orden se especifica que todas aquellas personas que hayan estado dentro de los 14 días anteriores a dicha llegada en territorio con alta incidencia de Covid-19 deberán registrarse en un plazo máximo de 24 horas desde la llegada, comunicando sus datos de contacto, mediante un formulario al que se puede acceder a través de la dirección de internet.
Entre los territorios afectados por dicha medida, se incluye por ahora a todas las personas procedentes de las Comunidades Autónomas de Aragón, Cataluña, Navarra, País Vasco y la Rioja, además de un número importante de países europeos y de otros continentes, entre ellos, Portugal con el que Galicia mantiene un importante intercambio comercial y de personas entre ambos territorios.
Esta Orden supone para los transportistas “una inasumible carga burocrática, teniendo en cuenta además que por su alta movilidad los transportistas pueden pisar los citados territorios afectados no sólo para cargar y descargar, sino para hacer el repostaje de su vehículo o su avituallamiento en ruta o su descanso obligatorio aunque sólo fuera por un corto intervalo de tiempo”
Para Fenadismer resulta “incomprensible la no exención del transporte por carretera de la citada regulación autonómica”, ya que ello supondría en la práctica que los aproximadamente miles de transportistas tanto españoles como del resto de la UE que diariamente cruzan la “frontera” gallega se verían abocados “a una inasumible carga burocrática, teniendo en cuenta además que por su alta movilidad los transportistas pueden pisar los citados territorios afectados no sólo para cargar y descargar, sino para hacer el repostaje de su vehículo o su avituallamiento en ruta o su descanso obligatorio aunque sólo fuera por un corto intervalo de tiempo”, añaden desde la Federación.
Única solución propuesta por la Xunta
Por ello, Fenadismer, a través de sus organizaciones territoriales en Galicia, mantuvieron ayer una reunión urgente con los responsables de las consellerías de Movilidad y de Sanidad con el objetivo de analizar el impacto de esta Orden en el sector del transporte por carretera sector y cómo ajustarla para que sea viable y efectiva.
En la reunión, los representantes de las asociaciones gallegas de transportistas manifestaron de forma unánime que la Orden, tal como está redactada, es “inaplicable para nuestro colectivo, dado que los conductores profesionales se desplazan habitualmente por territorios con alta incidencia de Covid-19, lo que obligaría en muchos casos a hacer varias comunicaciones de declaración sanitaria periódicamente”.
A fin de flexibilizar la aplicación de la norma en el sector del transporte, en este contexto, la Consellería de Sanidad ha aceptado que, en el caso específico de los conductores profesionales, ya sean residentes en Galicia o foráneos, “deberán cumplimentar una única declaración de datos, registrando la relación de territorios de alta incidencia del Covid-19 en los que ese conductor para y entra en contacto con personas de este territorio, no teniendo que indicar tampoco las fechas de entrada y salida de Galicia”, confirma Fenadismer.
Sin apoyo a la prevención
Sin embargo, los representantes de la Xunta “se han manifestado insensibles a las propuestas preventivas planteadas por las asociaciones de transportistas” con el fin de reducir el número de contagios en el sector del transporte dada su alta movilidad, y que pasarían, entre otras, por limitar la intervención de los conductores profesionales en las labores de carga y descarga de las mercancías en las plataformas logísticas y centros de carga, evitando de este modo que tuvieran que interactuar con otras personas trabajadoras de dichos centros, en las que según las estadísticas se multiplican los riesgos de contagio.