Los almacenes se hacen inteligentes
- 12 noviembre 2018 01:00
- Última actualización
13 noviembre 2018 17:57
Más allá de los almacenes convencionales que todos conocemos, las empresas han sabido adaptarlos a los nuevos tiempos para convertirlos en puntos de distribución, sin perder ese perfil de sistema de almacenamiento que les caracteriza. Desde hace muchos años, siempre que hemos oído hablar de un almacén, hemos imaginado una gran infraestructura en la cual se guardan múltiples productos y elementos, que se tenían bien almacenados con el fin de poder venderlos en el futuro. Es cierto que la palabra almacén, como tal, prácticamente se refiere a este concepto; sin embargo, en la actualidad tenemos que hacer referencia a los “almacenes inteligentes”. Porque los almacenes inteligentes son ya el presente y el futuro de la logística.
Simplemente con echar un vistazo a la palabra “inteligente”, ya podemos darnos cuenta de lo que va a significar todo esto, puesto que hoy en día existen múltiples elementos que han sido dotados de “inteligencia”, para que trabajen de una forma mucho más autónoma y así rentabilizar los procesos de producción y distribución, además de agilizar nuestras tareas.
En este sentido, los almacenes inteligentes se van a comportar como infraestructuras que están dotadas de nuevas tecnologías que ayudarán, en todo momento, a que los procesos a los que tenga que hacer frente la compañía sean mucho más rápidos, rentables y sobre todo, productivos. Para dotar a un almacén con la inteligencia a la que se ha hecho referencia, es preciso mencionar algunos aspectos básicos de la nueva era que vivimos.
Así, la computación en la nube, el comercio electrónico o incluso el uso de macrodatos, cobran un especial protagonismo. Lo cierto es que esta innovación tecnológica es la responsable de que actualmente se utilicen más estos almacenes inteligentes y se hayan convertido en un elemento esencial para que los almacenes tradicionales evolucionen hasta este nuevo concepto.
Para comprender mejor qué es exactamente un almacén inteligente, hay que referencia a tres aspectos clave: visibilidad, movilidad y flexibilidad
Visibilidad
La visibilidad cobra hoy un mayor protagonismo porque permite que los usuarios, de forma previa, tengan acceso a la información necesaria para poder desarrollar su tarea. Además, siempre teniendo en cuenta que todo ello se puede hacer en tiempo real. Por otro lado, también es importante hacer hincapié en este concepto debido a los medios tecnológicos utilizados actualmente, como es el caso de las tablets o los teléfonos inteligentes.
En cuanto a la movilidad, también se trata de un concepto de gran importancia, ya que va a permitir que se optimicen los almacenes, haciendo de ellos un lugar eficiente y que sean algo más que simples infraestructuras para “guardar cosas”. Por este motivo, se está invirtiendo cada vez más en la tecnología y no tanto en el equipo que la acompaña. Finalmente, en cuanto a la flexibilidad, hablamos de una arquitectura flexible, lo que hace que se puedan ejecutar múltiples tareas de una forma rápida, sencilla y con la mayor eficacia.
Objetivos
Cuando las empresas deciden apostar por los almacenes inteligentes es porque tienen claro que los objetivos que se van a conseguir con ellos van a ser muy beneficiosos para el negocio. Sin ir más lejos, uno de los principales objetivos que se intenta conseguir a través de los almacenes inteligentes es el aumento de la productividad, al igual que, en consecuencia se reducirán notablemente las pérdidas debido al proceso que se lleva a cabo dentro de estas infraestructuras. Del mismo modo, otro objetivo primordial es la mejora de la distribución y por ello los almacenes inteligentes se han convertido en puntos estratégicos para los negocios actuales.
El cambio es significativo. Los almacenes ya no son grandes superficies para guardar mercancías; ahora son mucho más, son puntos de distribución adecuados a los tiempos actuales, dotados con las mejores tecnologías del momento para agilizar los procesos y que el negocio prospere como es debido.
Son infraestructuras que cuentan con el equipo necesario para aumentar los beneficios de las empresas y además poder satisfacer la demanda de los usuarios de una forma mucho más ágil. Hoy en día, la actividad de almacenamiento requiere de los procesos tecnológicos con los que han sido dotados estos almacenes inteligentes, teniendo en cuenta que ello redundará en el crecimiento de la compañía. Se trata, en definitiva, de obtener procesos automatizados más veloces que permitan, entre otras cosas, controlar en mayor medida las mercancías.
Tecnologías
En cuanto a las tecnologías más destacables en relación a los almacenes inteligentes, principalmente se utilizan las aplicaciones ERP, el Bin Picking y la lectura de códigos.
En cuanto a las aplicaciones ERP (Enterprise Resource Planning, que se traduce como Planificación de Recursos Empresariales), éstas se integran en los sistemas de gestión y se usan principalmente para controlar el inventario que hay dentro del almacén.
Asimismo, con estas aplicaciones también se pueden añadir otras tareas importantes para el proceso, como es la facturación, los pedidos y la logística. Aunque las aplicaciones ERP son muy prácticas, se utilizan normalmente en la venta al por menor y tienen un objetivo muy bien definido, como es la rotación del inventario.
Por su parte, la tecnología de Bin Picking hace referencia a los Sistemas de Robótica Guiada por Visión (VGR). Se trata de una nueva metodología que es capaz de seleccionar y extraer una pieza en concreto dentro de un lote de artículos. Utilizando una pinza inteligente, se escoge la pieza en cuestión de entre muchas otras y de forma posterior se deposita en otra cubeta para que pueda utilizarse para otros fines. Todo ello es posible gracias al sistema de visión en 3D que puede detectar la pieza que nos interesa. El proceso de Bin Picking es sencillo, se hace un barrido visual entre todas las piezas, luego se identifica el objeto concreto, después se extrae la pieza y finalmente, se coloca en otro lugar.
Cuando hablamos del tipo de lectura OCR (Optical Character Recognition), un algoritmo es capaz de leer una letra, número o combinación de ambos, realizando una lectura con gran precisión, algo que los sistemas convencionales de lectura OCR no son capaces de llevar a cabo, puesto han de ser “entrenados” basándose en una captura real de la imagen que va a ser procesar.
Beneficios
En cuanto a los beneficios que aportan los almacenes inteligentes, destacan la reducción de los tiempos en los que se realizan los procesos; mejora de la precisión de los resultados, tanto los que reales como los planeados; ahorro de costes en mano de obra; control más exhaustivo en relación a las entradas y salidas de las diferentes mercancías.
Aportar estos beneficios a cualquier tipo de negocio contribuye a incrementar su rendimiento y productividad, por lo que los almacenes inteligentes han ido ganando cada vez una mayor popularidad en el mercado.