AENA alcanzó en 2018 un beneficio neto de 1.327,9 millones de euros, lo que representa un 7,8% más que en el año anterior. Esta cifra refleja la evolución positiva del negocio y una disminución del gasto financiero, señaló AENA.
Teniendo en cuenta estos resultados, el Consejo de Administración ha acordado proponer a la Junta General Ordinaria de Accionistas la distribución e un dividendo de 6,93 euros por acción, lo que supone un incremento del 6,6% frente al ejercicio anterior.
En el Plan Estratégico aprobado en 2018, AENA mantiene una política de retribución al accionista consistente en la distribución como dividendo del 80% del beneficio neto individual anual generado por la sociedad para los años 2018, 2019 y 2020.
Los ingresos totales consolidados aumentaron hasta los 4.320,2 millones de euros, lo que supone un incremento del 7,3% con respecto a 2017.
De ellos, destacan los ingresos comerciales (el 26,9% del total), que con 1.162,4 millones de euros crecieron un 9,6%.
El beneficio bruto de explotación (ebitda) en 2018 fue de 2.656,6 millones de euros, un 5,5% más que en el ejercicio anterior.
La deuda financiera se situó en los 6.654,1 millones de euros frente a los 7.156 millones de euros al cierre de 2017. La ratio de deuda financiera neta ebitda descendió de 2,8 en 2017 a 2,5 veces a 31 de diciembre de 2018.