Según anunció ayer Luis Gallego, presidente ejecutivo de Iberia, en el transcurso del acto conmemorativo del XXV Aniversario de la Zona Industrial de La Muñoza, en Barajas, Iberia tiene previsto en 2016 regresar al mercado asiático con dos nuevas rutas directas: Madrid-Japón y Madrid-Shanghai.Con respecto a Tokio, Iberia vuelve a Japón después de su aventura de los años 80 y lo hará con una estructura de costes y una flota renovada.Iberia ha programado tres vuelos semanales con Tokio-Narita a partir del próximo 18 de octubre, con salidas todos los lunes, jueves y sábados.La de Iberia será la única ruta directa entre España y Japón.De igual forma, Iberia también comenzará a volar en 2016 sin escalas entre Madrid y Shanghai con tres vuelos a la semana. La aerolínea ya ha iniciado las conversaciones con las autoridades chinas para poner en marcha la operación por lo que la fecha de lanzamiento está pendiente de permisos, slots y negociaciones. En la actualidad, tampoco hay vuelos de pasaje sin escalas entre España y Shanghai, que es además el puerto con más tráfico de contenedores del mundo.Iberia prevé operar ambas rutas con su nueva flota de aviones de pasaje A-330/200, cuya oferta de carga en bodega va a representar un renovado aliciente en el mercado, sin oferta directa con estos destinos ahora mismo en Madrid y que es servido a través de Europa, de los grandes hubs de Medio Oriente o de otros enclaves asiáticos como Seúl o Bangkok.Con estas dos nuevas rutas, Madrid-Barajas pasará a tener seis vuelos diarios con Extremo Oriente, según destacó ayer la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, presente en el acto en La Muñoza.Las rutas de Iberia se unirán a las ya operadas por aerolíneas como Korean Air, Thai Airways o Air China, así como a la ruta Madrid-Hong Kong, que prevé comenzar a operar Cathay Pacific a mediados de este año.CostesSegún la aerolínea española, “Iberia apuesta por Asia, mercado donde, hasta ahora, no estaba presente, gracias a la transformación puesta en marcha por la compañía y a la implantación de su Plan de Futuro”, con el que “Iberia ha reducido su base de costes e incrementado su productividad y eficiencia, al mismo tiempo que trabaja para aumentar sus ingresos y cambiar la cultura para hacer frente a los retos del futuro”.“Todo ello permite ahora a Iberia acometer el salto al continente asiático con la perspectiva de que sus operaciones allí sean rentables y sostenibles en el tiempo”, asegura la aerolínea.