VALENCIA. Para conocer mejor cuáles serán los pasos que se van a dar en el transporte por carretera, este Diario repasa la actualidad del sector con Manuel Perezcarro Martín, secretario general de CETM Frigoríficos.
¿Cómo ha sido la actividad en el sector del transporte por carretera a temperatura controlada en 2023? ¿Cómo se ha comportado el sector con respecto al ejercicio 2022
y anteriores?
Por lo que respecta al transporte de productos hortofrutícolas, el año 2023 no ha sido bueno. Ello ha sido consecuencia de las condiciones meteorológicas que se han dado, afectando a las producciones y a la exportación que, de nuevo, se ha visto reducida en el volumen de toneladas, no en el precio. Esto conviene aclararlo, porque la información que se publica sobre las exportaciones siempre hace referencia al valor de estas y no al tonelaje, que es lo que afecta al sector. Con respecto al 2022 y anteriores el sector ha podido seguir defendiéndose gracias a las ayudas recibidas por el combustible. Si no es por éstas,
los resultados hubieran sido preocupantes.
¿Cuáles son las previsiones que manejan de cara a este año 2024?
La verdad es que 2023 no ha terminado bien, ya que la campaña de invierno ha sido mucho más corta de lo habitual, porque la entrada del frío en toda Europa se ha retrasado mucho y los distintos países han podido abastecerse con sus propios productos. Hacer previsiones para 2024 en este sector es muy complicado, ya que depende mucho de factores externos que no son controlables como la meteorología, el precio de los carburantes o el comportamiento del mercado. Lo que sí está claro es que el Gobierno no ha prorrogado las ayudas en el gasoil y esto supondrá un varapalo para el sector.
¿Cómo prevé que será la evolución del sector en cuanto a actividad en los próximos años?
Estamos sufriendo una situación anormal. Los efectos de la guerra de Ucrania y ahora la de Israel nos van a seguir afectando de manera negativa. El cambio climático, también nos está afectando de la misma forma que a la agricultura, sector del que dependemos. Si la economía no acaba de despegar y el consumo no se reactiva, nos veremos afectados negativamente. El transporte frigorífico también transporta carga general, esencialmente en los retornos y, por lo tanto, si las importaciones disminuyen y el mercado interior no se reactiva, tendremos problemas.