El tramo del proyecto está comprendido entre el enlace con la carretera N-340, que sirve de variante de Vinarós y Benicarló, y el enlace con la AP-7. Presenta un trazado rectilíneo, con una calzada de dos carriles de 3,50 m cada uno, sin arcenes y en muchos tramos sin bermas, y con numerosos accesos directos en ambas márgenes. En la actualidad unos 8.900 vehículos circulan por este tramo, siendo 1.400 de ellos vehículos pesados, según aforos realizados a finales de 2018.
El objeto del proyecto es mejorar la seguridad vial del tramo de actuación, al tiempo que permitirá mejorar la conexión de la AP-7 con la red viaria de la comarca del Bajo Maestrazgo, en especial con la N-340, la CV-11 y la CV-101 de acceso al municipio de Alcanar.
Esta es una nueva actuación de la serie de actuaciones previstas para mejorar la conectividad de la AP-7 con el resto de la Red de Carreteras del Estado, una vez que se ha liberalizado.