Ante la noticia que el Gobierno Español prevé incrementar el impuesto al diésel en cerca de cuatro céntimos el litro para el 2021, el Gremi de Transports i Logística de Catalunya se muestra preocupado por el impacto que tendrá este incremento en miles de transportistas.
Según señala el Gremi, a pesar de que parece que la tributación del gasóleo profesional y bonificado no sufrirá ninguna variación, el incremento sí que afectaría a los transportistas de vehículos de menos de 7,5 toneladas.
En este sentido, desde el Gremio se considera que no es momento de subir impuestos, "lo que hace falta es incentivar la economía". El incremento de los impuestos en muchos casos no implica más recaudación, "más bien al contrario, puede resultar contraproducente, puesto que limita la capacidad adquisitiva de las empresas y de los consumidores".
Por otro lado, el transporte ligero, aproximadamente 130.000 empresas, mayoritariamente autónomos, sufre históricamente un agravio respete el transporte pesado de mercancías, puesto que queda fuera del gasóleo profesional bonificado, por lo tanto tendrán que soportar íntegramente la subida de este impuesto. Para Antonio Martínez, presidente del Gremio, “esto no es nuevo, siempre ha estado así, ahora, en estos momentos de pandemia, es el momento de reconducirlo”.
El Gobierno estatal, que prevé esta subida en los Presupuestos Generales del Estado, lo justifica con la voluntad de equiparar la fiscalidad que soporta la gasolina con el diésel y siguiendo las recomendaciones de la Unión Europeo y la OCDE en materia de fiscalidad ambiental. Por lo tanto, el tipo de impuesto para el diésel pasa de 30,7 a 34,8 céntimos por litro, a pesar de que seguirá siendo inferior a los 40,07 céntimos de la gasolina.
