Por una parte, Scania ha desarrollado una función de alarma que se ejecuta a nivel local y que envía notificaciones a través de SMS y correo electrónico, mediante el sistema de gestión de flotas (FMS). “Cuando el sistema de alarma está activado, se supervisa el nivel de combustible hasta 65 horas, siempre que el interruptor de la batería esté activado. Si el nivel del combustible baja de forma repentina en un 4-8 %, la alarma se activa”, explican desde la compañía.
En segundo lugar, la compañía está implementando un sistema de manejo de carga mejorado para camiones con caja intercambiable que tengan que manejar contenedores u otras superestructuras. “Al utilizar la suspensión neumática para elevar o bajar el camión debajo de la caja es muy importante que el movimiento sea exclusivamente vertical. De esta forma es posible realizar correctamente tareas tan desafiantes como colocar el camión en la posición correcta o, a la hora de descargar, evitar la posibilidad de dañar los soportes de apoyo con el movimiento horizontal”, apuntan desde Scania.
Además, Bodybuilder Communication Interface (BCI), la centralita para carroceros líder en el mercado de Scania, ahora también se puede utilizar para supervisar y medir las funciones relacionadas con la carrocería del camión.
El sistema BCI del camión recoge los datos de los sensores que normalmente miden factores como el peso, la temperatura, los ángulos y las alarmas, entre otros. A través del sistema integrado C300 Communicator de Scania estos datos se envían al sistema FMS del cliente. “Esto significa que todos los datos esenciales del vehículo y de la carrocería se almacenan en un mismo lugar al que se puede acceder fácilmente”, afirma la compañía.
Por último, Scania ha actualizado sus motores de 9 y 13 litros para que sean "aún más eficientes". Los nuevos motores se basan en una “baja fricción interna, turbos de geometría fija actualizados y componentes auxiliares inteligentes”, concluyen.