Una salida abrupta del Reino Unido de la Unión Europea el próximo 31 de octubre podría suponer un aumento de los precios de los aranceles, advierte la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM).
Una de las materias que suscita mayor polémica en el sector del transporte por carretera, explica CETM, son los importes de los aranceles aduaneros.
Reino Unido ya ha publicado la cuantía pero no descarta que se produzca una subida de los precios.
Después de asumir el poder, el recién elegido como primer ministro británico, Boris Johnson, ha afirmado que habrá Brexit “cueste lo que cueste”.
Si la Unión Europea (UE) y Reino Unido no logran alcanzar un acuerdo podrían implantarse nuevas medidas en los puntos fronterizos y aduanas.
A las espera de las negociaciones que se puedan producir, el embajador de Reino Unido en España, Simon Manley, ha informado de las posibles modificaciones que tendrían lugar si Bruselas se niega a ajustar el acuerdo.
Las relaciones económicas entre España y Reino Unido son clave para ambos países, puesto que Reino Unido es el quinto país de exportación y el octavo en importación para España.
Por ello, ambas Administraciones han garantizado su disponibilidad para que las relaciones comerciales sigan manteniéndose como hasta ahora.
Por su parte, la directora del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, Pilar Jurado, ha reconocido que, aunque reine cierta atmósfera de calma, al considerar Reino Unido como tercer país, las aduanas españolas llevarán a cabo “todos los controles necesarios que exige la UE”.
Por otro lado, Jurado pide a los transportistas que operen en el país británico que lleven toda la documentación a bordo del camión (pasaporte, declaración sumaria de entrada (ENS) y declaración de seguridad) y que, además, se envíe telemáticamente.
La documentación para los transportistas europeos se mantiene igual, es decir, no hay documentos nuevos en proceso. El Gobierno británico ha confirmado que continúan vigentes los acuerdos sobre horas de conducción, reconocimiento del CAP, licencia comunitaria y cabotaje. En el caso del régimen TIR, ADR, ATP y mudanzas no se presentan modificaciones.
Asimismo, desde la Administración británica recuerdan que será necesario que los transportistas lleven la tarjeta verde o la documentación que acredite el seguro del vehículo, en caso de no acuerdo.
Una de las materias que suscita mayor polémica en el sector son los importes de los aranceles aduaneros. Reino Unido ya ha publicado la cuantía, pero no descarta que se produzca una subida de los precios.
CETM pide a las empresas del transporte que hagan llegar toda su documentación a los puntos fronterizos y aduanas antes de la llegada a la frontera de la mercancía.
Además, aquellas que necesiten importar o exportar a Reino Unido tendrán que estar dadas de alta en el EORI. Para los que realicen un volumen mayor de movimientos, es preciso que tramiten el alta como OEA (operador económico autoriza- do). Dicho procedimiento ayuda a simplificar los trámites en las aduanas.
Otro de los puntos a tener en cuenta es que, hasta el 31 de diciembre de 2020, los ciudadanos europeos podrán acceder a Reino Unido por tres meses mostrando su carnet de identidad. Después, si se produce el Brexit sin acuerdo y si necesitan permanecer más tiempo, deberán solicitar una autorización al departamento de Interior o bien abandonar el país.
En el caso de que se produzca el peor de los escenarios y el país británico se vea forzado a un "no acuerdo", los productos de origen animal deberán someterse a los controles y legislación británica.
Las últimas declaraciones de Boris Johnson vaticinan que el “divorcio” entre la UE y Reino Unido no será fácil. Por ello, en la página web de la Agencia Tributaria las empresas encontrarán toda la información pertinente y el acceso a los trámites necesarios como el registro del número EORI. En ese sentido, desde la Administración española instan a las empresas a elaborar un plan de contingencia para poder afrontar cualquier posibilidad.