El alcalde de Sagunto, Quico Fernández, asistió el pasado jueves a una reunión en la consellería de Economía para tratar la problemática de la red interna ferroviaria actual que utilizan empresas como ArcelorMittal y Thyssenkrupp Galmed.
Esta reunión, coordinada por el Ayuntamiento, se debe a la demanda de las empresas citadas, ante la preocupación por la inadaptación de la red ferroviaria actual con el ancho europeo.
Debido a la importancia de la logística para las empresas, es necesario solventar todo tipo de problemas, especialmente con la conexión ferroviaria, que puedan provocar pérdidas en la competitividad de las empresas. Por este motivo, el Ayuntamiento de Sagunto ha decidido hacer de intermediario para reparar los problemas que puedan tener las empresas del municipio con la red ferroviaria actual.
A la reunión también asistieron: el conseller de Economía, Rafael Climent; el comisionado del Corredor Mediterráneo, Josep Vicent Boira; la directora gerente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Inmaculada García Pardo; la diputada autonómica, Teresa García; y representantes de las empresas afectadas ArcelorMittal y Thyssenkrupp Galmed.
Según Quico Fernández, “este problema se plantea desde las empresas más importantes y también desde otras que están conectadas o que sacan su mercancía a través de estas líneas ferroviarias, pero el ministerio de Fomento ha tomado la decisión de no instalar un tercer hilo en el tramo Castellón-Vandellós por el coste que tiene, por lo tanto, lo que se debe hacer es adaptar la red ferroviaria dentro de Sagunto, y por este motivo nos hemos reunido hoy”.
Fernández aseguró que la primera posibilidad que se ha planteado es “la firma de un convenio entre la Generalitat y las empresas que van a ser beneficiarias de una inversión de 7 u 8 millones de euros, con la contrapartida de que las vías serán compartidas y podrán ser de uso para Adif”. Se trataría de un tercer hilo compartido, no solo de las empresas, ya que sería público.
Además, según explicó el primer edil, en la reunión se intentó llegar a más acuerdos, ya que desde el Comisionado se han comprometido a buscar toda una serie de posibilidades y ayudas en la misma línea que otros polígonos industriales, “como el caso de BASF en Tarragona, que consiste en captar fondos europeos para que las empresas tengan ayudas directas en sus proyectos de adaptación”.
“Estamos situados en la periferia de Europa y la competitividad de nuestras empresas depende en gran medida de su logística y especialmente en este caso de la conexión ferroviaria. Cualquier problema a nivel logístico supone una pérdida de competitividad de las empresas, por eso las administraciones deben ayudar directamente con las infraestructuras”, concluyó el alcalde.