ALIA, el Clúster de Logística de Aragón, ha estado presente este jueves en la reanudación del tráfico de mercancías por tren desde la estación de Canfranc (Huesca) después de varios años de inactividad por las obras de remodelación de la línea ferroviaria, en concreto en las instalaciones de la empresa Transcanfranc, que cuenta con un silo de rotación para el cereal transportado en camiones procedente del sur de Francia. El tren ha partido con 900 toneladas de maíz a granel recolectados en la región de Nueva Aquitania con destino a distintas empresas de agroalimentación, en una primera salida que ha contado con la presencia de Javier Apellániz, director de Transcanfranc. La empresa tiene previsto realizar varios viajes semanales para transportar maíz, trigo duro y otros cereales desde el país vecino a distintos puntos de España.
Esta solución intermodal ha sido posible gracias al acuerdo entre Transcanfranc con la sociedad logística ferroviaria Go Transport y Alsa Rail, alianza en la que ALIA ha participado activamente. “Es un día importante por lo que supone de simbólico que las mercancías vuelvan a circular por esta línea internacional modernizada, y por la importancia de estos envíos en el suministro estable de cereales desde Francia a empresas españolas”, ha explicado Ángel Gil, director general de ALIA.
Esta acción se enmarca dentro de las acciones realizadas por el clúster aragonés para promover acuerdos y soluciones intermodales que impulsen el transporte de mercancías desde Aragón a través de líneas ferroviarias regulares, buscando soluciones sostenibles alineadas con los objetivos de descarbonización marcados por la Unión Europea.
Ya el año pasado se lanzaron propuestas de partida para empezar a hacer estudios de costes, viabilidad técnica y detectar la potencial oferta y demanda de contratación de contenedores por ferrocarril a Oporto y París, y desde entonces en el seno del clúster se ha seguido trabajando en ver opciones de este medio de transporte que ayuden a las empresas y contribuyan a consolidar el nodo logístico aragonés. “Los proyectos ferroviarios son complejos y de larga maduración, hay que crear sinergias entre operadores y estudiar muchas alternativas para que alguna prospere, como es este caso”, ha dicho Gil, quien ha subrayado la “vocación de ALIA por ayudar a las empresas a avanzar en soluciones intermodales, sostenibles y en conexión con las autopistas ferroviarias”.