La compañía Cemasa (Consignaciones Europeas Marítimas, S.A.) acometió, como consignatario del barco y de la mercancía, una operación de carga que no suele ser demasiado habitual en el Puerto de Bilbao si se tiene en cuenta el gran tamaño de las piezas que han debido ser manipuladas, según explicaron a este Diario fuentes de Cemasa.Los dos depósitos, fabricados por la empresa Laintek, Técnicas de Montaje, S.L. en la localidad vizcaína de Urduliz, fueron trasladados al Puerto en un transporte especial dispuesto por Transportes Arbegui en sendos camiones de 14 ejes, ya que las piezas alcanzaban prácticamente 20 metros de longitud y 5 metros de diámetro.Prueba de las extraordinarias dimensiones de estos dos depósitos intercambiadores de calor fue la necesidad que hubo de cortar una catenaria de la línea de ferrocarril para garantizar el transporte, según apuntaron en Cemasa.Con total éxitoLa operación de carga en el barco se llevó a cabo en la mañana del pasado viernes en el Muelle Reina Victoria del puerto bilbaíno y transcurrió según lo previsto, sin que se registrará ningún incidente. De hecho, se realizó en apenas dos horas.Las dos piezas fueron cargadas directamente desde los camiones en el Pantanal, un buque de mercancía general con medios propios (dos grúas de 250 toneladas cada una), con bandera de Antigua y Barbuda y tripulación ucraniana y rusa.Las labores de estiba de la mercancía fueron llevadas a cabo por Agemasa. La mercancía tiene como destino el puerto esloveno de Koper, en el Adriático.