El grupo de confección Mango ha reactivado su inversión en una nueva plataforma logística en Llicá de Munt (Barcelona) que asciende a 120 millones de euros, según un estudio del Instituto de Estudios Territoriales de la Generalitat y la Universidad Pompeu Fabra.La inversión ya estaba prevista en el 2001 y de hecho Mango, la empresa propiedad de Isak Andic, había adquirido 120 hectáreas de terreno en 1999, pero luego topó con diversos problemas administrativos para llevarla a cabo.Ahora, tras la victoria municipal de ERC, Mango ha alcanzado un nuevo acuerdo con las nuevas autoridades del consistorio tras modificar su plan y se prepara para la construcción de este nuevo centro logístico, que será uno de los más importantes de Catalunya.Portavoces de Mango se han limitado a señalar que está previsto que las obras comiencen en dos años, cuando se tramiten los proyectos pertinentes, y que dentro de siete podría estar totalmente operativo.Según el director general de Mango, Enric Casi, este nuevo centro logístico será clave para que Mango pueda mantener su nivel de crecimiento orgánico, porque el que el grupo abre un centenar de tiendas cada año.De hecho, los planes de Mango prevén que en cinco años, y mientras siguen las obras del centro, una parte del mismo ya se encuentre en funcionamiento ya que, para entonces, según los planes previstos, la cadena de ropa catalana tendrá cerca de 1.200 puntos de venta en todo el mundo, 500 tiendas más que las actuales.Mientras se aprueban los permisos para esta gran inversión del grupo, Mango está utilizando de manera temporal una planta en Terrassa de 10.000 metros cuadrados y un almacén en Parets del Vallés de 22.000 metros cuadrados para cubrir su demanda de servicios logísticos, que sigue creciendo.Esperamos que en una primera fase sólo usaremos la mitad de este gran centro logístico en Llicá de Munt, mientras que el resto lo subcontrataremos a otros operadores con el compromiso de que nos den servicios en momentos de punta de demanda, lo que nos permitirá una gran flexibilidad, ha explicado Casi.Luego, de manera paulatina, Mango irá recuperando el centro, que se encuentra a sólo 10 kilómetros de su actual sede en Palau de Plegamans, en función del aumento de sus necesidades logísticas.El estudio de la Pompeu Fabra sobre el impacto económico de este centro, que denomina la Ciudad Logística de Mango en Llicá de Munt, calcula que generará una ocupación de cerca 13.000 trabajadores, de los que 1.700 trabajarán en la construcción del complejo y más 11.000 en el desarrollo de la actividad logística.La empresa de moda Mango aumentó su beneficio neto un 7 por ciento en el año 2003 y cerró el ejercicio con un resultado de 64,8 millones de euros, según reflejan las cuentas anuales.