Ya hemos comentado alguna vez que los puertos son como museos, llenos de piezas peculiares y paisajes únicos. Y lo que a simple vista pudiera parecernos una composición casual, a nuestra imaginación puede convertirse en una interesante obra de arte dotada de importantes contrastes de color y hermosas texturas. Porque como todo, lo artístico tiene su origen en la naturaleza, incluida la chatarra.