Marina Demianenko e Inés Pryschepa son las responsables de esta compañía, que cuenta con un profundo conocimiento de Rusia. Para ambas responsables de Strever, este mercado tiene un gran potencial y un campo de trabajo muy amplio. Rusia tiene cada vez más negocios con Europa porque es un mercad abierto y con mucho hambre.Strever tiene su sede central en Barcelona y cuenta con delegaciones en Madrid, Valencia y Moscú. Además, la empresa dispone de almacenes propios en Polonia y Lituania, donde agrupamos mercancías de nuestros clientes para reducir los costes del transporte, explica Marina Demianenko.Strever está especializada en cargas completas y grupaje con Europa del Este y ofrece salidas regulares a estos países y a los mercados de Asia central, como Kazajstán o Uzbekistán. La compañía también gestiona importaciones hacia España procedentes de Rusia, Lituania, Ucrania y Bielorusia.La empresa realiza numerosas operaciones de transporte especial para empresas tanto españolas como multinacionales que construyen plantas en el este de Europa. La deslocalización de empresas ha aumentado este tipo de operaciones en sectores como la química, cerámica o sector sanitario, explica Inés Pryschepa.En estas operaciones, Strever lleva a cabo toda la coordinación, desde la contratación de seguros al despacho de aduanas, la obtención de certificados y la elaboración de toda la documentación necesaria.En la actualidad, Strever cuenta con una plantilla de diez personas. Durante este año, la compañía mantendrá su estructura actual a la espera de ver cómo evolucionan los mercados, ya que es un año de incertidumbre, concluyen las responsables de Strever.