El contenedor cisterna accidentado se encontraba en la terminal de Renfe en el Puerto de Barcelona cuando, a las 9.30 horas durante la maniobra de carga, se golpeó con el suelo. La grúa que lo manipulaba lo perdió en el momento de carga y con el golpe una de las válvulas del contenedor se rompió. Por ahí fue por donde comenzó a escaparse la dimetilamina, un producto químico inflamable y corrosivo, que activó la alerta del plan de emergencias químicas Plaseqcat, de la Generalitat. La cisterna tenía en su interior 20.000 litros de este producto químico.Fuentes de los Bomberos de la Generalitat informaron de que el escape se había registrado en una de las cisternas que la compañía ferroviaria posee en el puerto barcelonés.Hasta el lugar del incidente se desplazaron efectivos de los Bomberos de Barcelona y de la Generalitat, que trabajaron durante toda la mañana para confinar y controlar el escape de esta sustancia tóxica.Al cierre de esta edición, los bomberos todavía trabajaban en controlar el escape que ya estaba acotado por un círculo de contención que evitaba la afección de la red de alcantarillado.La fuga obligó a cortar la Ronda Litoral, lo que provocó retenciones de hasta cuatro kilómetros en dirección al nudo de Llobregat y de unos dos kilómetros en sentido al nudo de la Trinidad.Por su parte, el Departamento de Interior de la Generalitat matizó que la fuga ha sido pequeña. Adif trasladará el producto a otra cisterna.