Fundada en 1844 en Alemania, J.F. Hillebrand, empresa de servicios logísticos orientados al sector beverage (bebidas y licores), está presente en la capital vizcaína desde 1996, por lo que en 2011 cumple su decimoquinto aniversario en Bilbao.Desde hace aproximadamente un mes viene ocupando una nueva ubicación en el número 28 de la calle Ibáñez de Bilbao, muy próxima a su anterior dirección, en la que dispone de una superficie de unos 280 metros cuadrados que ofrece mayor espacio para su 12 trabajadores, a los que se unen otras dos personas que trabajan en el almacén que opera Selzi en el Puerto de Bilbao.La razón fundamental del cambio de oficina viene dada por la necesidad de disponer de un mayor espacio físico y de la mejora de las condiciones del entorno de trabajo. De esta manera, la nueva oficina permitirá afrontar sin estrecheces los futuros crecimientos de la compañía.Departamento de AduanasEn este sentido, el director de la oficina de J.F. Hillebrand en Bilbao, Miguel A. Alonso, plantea como uno de los principales objetivos de la compañía para este año la creación de un departamento de Aduanas propio en Bilbao, así como la solicitud de la autorización para operar como despachante de aduanas. Todo ello se uniría a la reciente obtención de su condición como Operador Económico Autorizado, el pasado mes de octubre.Con todo ello, J.F. Hillebrand reforzará su sólida posición en el sector del beverage, que desde la oficina de Bilbao atiende principalmente los mercados de América del Norte (EE.UU. y Canadá) y Sudamérica, mientras que desde la oficina de Barcelona se cubre Europa, Extremo Oriente y el resto de mercados internacionales.Prudente optimismoPor su parte, la estructura de J.F. Hillebrand en España se completa con una oficina en Valencia, creada en febrero de 2010 tras la compra de T.O.D, y especializada en el mercado flexitank, de bebidas a granel.A pesar de la delicada situación económica internacional y de su prudencia en las previsiones, Miguel A. Alonso se muestra optimista y confía que en 2011 se repita al menos el ligero crecimiento experimentado por la compañía a nivel global durante el pasado ejercicio.Para ello, J.F. Hillebrand añade a su larga trayectoria en el sector, varios elementos que aportan un alto valor añadido a su actividad, tales como un departamento informático propio, localizado en Holanda, que desarrolla sistemas dirigidos en exclusiva a la industria de bebidas en general, con avanzadas herramientas de seguimiento, un departamento propio de desarrollo de negocio o de supply chain management, por citar tan solo algunos ejemplos.