La estrategia de hacerse el loco ya no funciona
¿Quién no se ha echado unas risas al recibir un whatsapp o email y ver alguna palabra “imprecisa” en el escrito, obra del todo poderoso corrector automático que todos - sí, todos, que no nos engañen los más listos- tenemos en modo ON en nuestros móviles ? ¿Quién no ha enviado un Salidos y buen fin de semana? Pues eso y así pasa lo que pasa.
- 30 noviembre 2020 01:00
- Última actualización
27 noviembre 2020 16:07
El pasado miércoles, gracias a las prisas, a la escasa comprensión lectora de algunos y al corrector automático (lo que yo les diga: ¡lo carga el diablo!), las redes sociales viralizaron dos mensajes convertidos inmediatamente en trending topic: el fallecimiento de Diego Armando Maradona y la muerte de la diva del pop Maddona. Qué se parecen los nombres y al leerlos o escribirlos rápido se confunden... Ya... ¿Ya saben lo que pasó después verdad? Memes y cachondeo. Of course.
¿Y por qué les hablo de esto? Pues porque hay circunstancias en las que tengo la impresión de que los responsables públicos (supuestos conocedores de las áreas en las que desarrollan su dirección y gestión) dicen sí, pero escriben no en los informes, como si pudieran echar la culpa de todo al corrector ortográfico. Los proyectos aprobados o incluidos en los Presupuestos Generales del Estado afectan -y mucho- a la ciudadanía, a su presente y, lo más importante, a su futuro. Los puertos son infraestructuras determinantes, estratégicas para el país y deberían contar con todo el respaldo de la Administración.
Parece que solo se avanza a golpe de protesta y reivindicación constante de los empresarios. ¿De verdad no es posible gestionar siendo estrategas y confirmando las potencialidades de cada proyecto?
El Puerto de Algeciras ha confirmado que, tras los datos acumulados hasta octubre que rozan los 90 millones de toneladas movidas (-2,7%), cerrará 2020 por encima de los 100 millones de toneladas de mercancías. Repito: por encima de los 100 millones de toneladas. Además, el Puerto superará los 100 millones de toneladas, volumen que en Europa solo se mueven en Rotterdam, Hamburgo y Amberes, por quinto año consecutivo. Repito: por quinto año consecutivo.
Y mientras esto sucede, mientras los responsables de la Autoridad Portuaria y la comunidad portuaria salen al mercado internacional a partirse la cara con quien haga falta, siguen sin llegar las inversiones necesarias al Campo de Gibraltar. Y eso que últimamente hemos tenido buenas noticias, como comentaba el otro día el presidente del Puerto, Gerardo Landaluce, porque se ha dado luz verde a continuar con la tramitación de la propuesta final del Plan Director de Infraestructuras, se ha puesto la primera piedra de la terminal intermodal del sector San Roque del Área Logística de Algeciras y ha escalado por primera vez en TTI Algeciras el “CMA CGM Jacques Saadé”, el mayor portacontenedores del mundo propulsado por Gas Natural Licuado. Pero, pese a todo, ¿para cuándo la ejecución de la conexión ferroviaria Algeciras-Bobadilla-Madrid, trazado que es doblemente prioritario para la Unión Europea al estar incluido en los corredores Mediterráneo y Atlántico? Pero si el pasado mes de octubre, a pesar de las circunstancias, el Puerto batió su récord de actividad ferroviaria en la terminal ferroportuaria de Isla Verde Exterior, kilómetro cero de dos de los nueve ejes prioritarios de la red básica de las TEN-T, con 4.866 TEUs y 111 trenes operados. ¿Qué más hay que hacer?
A ver, que me quede claro, si el ferroviario es un modo estratégico que, además, se combina a la perfección con los objetivos de sostenibilidad y eficiencia de la cadena logística deseados, ya que saca de la carretera a miles de camiones, ¿a qué tanto rollo?Por favor, que parece (ejem) que solo se avanza a golpe de protesta y reivindicación constante de los empresarios. ¿De verdad no es posible gestionar siendo estrategas y confirmando las potencialidades de cada proyecto?