Entre estos altos cargos está el actual conseller de Educación, Cultura y Deporte de la Generalitat Valenciana. A él se suman Imma Orozco, secretaria autonómica de Política Territorial, Urbanismo y Paisaje de la Generalitat Valenciana; Enric Juan, director general de Infraestructuras de Servicios Sociales; los diputados en las Cortes Valencianas Fran Ferri, Graciela Ferrer, Juan Ponce, Papi Robles, Carles Esteve y Josep Nadal; María Josep Amigó, vicepresidenta de la Diputación de València; y Àgueda Micó, coportavoz de Compromís.
En un comunicado, Joves PV critica lo que consideran “el desarrollismo desmesurado del puerto” y la “destrucción de un ecosistema” como el de La Punta.
Desde la formación política se pide la reversión de toda la ZAL para convertirla en un pulmón verde para la ciudad, apuestan por un nuevo modelo económico y remarcan que en la actual situación de emergencia climática no hay lugar para proyectos como estos.
Asimismo, en el comunicado, consideran un error el paso dado por el Ayuntamiento de Valencia hace unos días dando luz verde al proyecto, aunque lo circunscriben a una “obligación administrativa”.
Por otro lado, se muestran partidarios de abrir un debate en torno “al puerto de Valencia que es o ha de ser” y se muestran contrarios a los grandes proyectos en los que anda inmersa la dársena valenciana, como la Ampliación Norte o la necesidad de contar con un Acceso Norte.
A pesar de compartir responsabilidad de Gobierno tanto en el Ayuntamiento de Valencia o en la Generalitat Valenciana, lo cierto es que la política territorial siempre ha sido un punto de conflicto entre PSPV-PSOE y Compromís. No hay más que recordar las divergencias entre Joan Ribó (alcalde de Valencia, de Compromís) y Sandra Gómez (vicealcaldesa, del PSPV-PSOE) en relación al proyecto de adjudicación de la Terminal Norte del puerto.