La compañía se encargará del operativo logístico del evento, aportando los medios para el transporte de las vallas, materiales promocionales y carpas, así como otros vehículos expresamente adaptados para La Vuelta: podio, gabinete médico, oficinas, control de firmas o zona para los medios de comunicación.Se trata de un despliegue al que se unirá un equipo de profesionales de Azkar, que vivirá de lleno las tres semanas de La Vuelta y velará por el cumplimiento de las necesidades de la organización en las distintas localizaciones. En esta edición, además, los conductores de los vehículos se enfrentarán a nuevos retos, como la llegada a la escarpada meta de la 14ª etapa, prevista en la mítica cumbre de los Pirineos franceses de Ausbique, escenario determinante en pasadas ediciones del Tour de France.