Menú
Suscripción

Barcelona se abre al mundo

Barcelona es hoy en día el principal hub logístico e intermodal del sur de Europa, ejerciendo además como centro mediterráneo de la innovación. La capital catalana concentra un elevado número de infraestructuras modernas, de calidad y con marcado carácter internacional, dedicadas a la logística, entre las que destacan el puerto y el aeropuerto, la ZAL, la Zona Franca y Mercabarna. Catalunya, región de la cual Barcelona es su capital económica, cultural y administrativa, concentra el 23,8% de la superficie dedicada a logística en España y cuenta con alrededor de 40.000 compañías de transporte y logística, que generan unos 155.000 puestos de trabajo.

  • Última actualización
    28 septiembre 2018 17:04

Pero Catalunya y Barcelona no son solo logística. En el área de influencia de Barcelona opera a diario un amplio, competitivo e innovador tejido industrial y de servicios, un conjunto de empresas, de sectores tanto consolidados como emergentes, que ha configurado un potente polo económico muy enfocado al comercio exterior. De hecho, Catalunya exportó el año pasado mercancías por valor de 60.194 millones de euros, lo que representa alrededor del 25% del total de las exportaciones de España.Este potencial industrial y exportador, así como la diversificación de su actividad económica, han convertido a Catalunya en una de las regiones europeas más atractivas para los inversores, lo que demuestran los 2.968 millones de euros de inversión extranjera captados por la región el pasado ejercicio, según datos del ministerio de Economía y Competitividad.Para dar servicio a todo este potencial productor y exportador, y apoyada por una situación geográfica privilegiada, en Barcelona confluyen en unos cinco kilómetros de radio diferentes corredores internacionales y todas las infraestructuras necesarias para operar en cualquier modo de transporte: marítimo, aéreo, ferroviario y carretera. Según Barcelona-Catalunya Centre Logístic, el sector logístico aporta más del 4% del Producto Interior Bruto (PIB) de Catalunya, el 12% del PIB del sector de servicios y da empleo a un 4% de los trabajadores de esta comunidad autónoma. Un caso relevante es el del Puerto de Barcelona, que por sí solo representa aproximadamente el 2% del PIB catalán.Catalunya y su capital, Barcelona, han apostado fuerte en los últimos años por la logística. Su área de influencia se extiende más allá de las fronteras administrativas de España, abarcando una eurorregión formada por el corredor Barcelona-Lyon que concentra 17 millones de habitantes y una producción de casi 1 billón de euros, lo que la sitúa en los puestos 6 y 11 del mundo en cuanto a población y riqueza, respectivamente, según datos del Ayuntamiento de Barcelona.La internacionalidad de Barcelona queda reflejada no solo en el peso que el nombre de la ciudad tiene en todo el mundo, sino también en algunos datos objetivos, como el hecho de que Barcelona sea uno de los destinos preferidos de la inversión extranjera, según un estudio de la consultora internacional EY, que sitúa la capital catalana como la octava ciudad europea más atractiva para invertir este año, por delante de ciudades como Londres, París, Berlín, Frankfurt, Ámsterdam, Bruselas o Múnich.Barcelona, además, se sitúa entre las diez primeras ciudades del mundo en reputación. Según los resultados del Informe City Rep Track del Reputation Institute, la capital catalana se sitúa como la novena ciudad del mundo con mejor reputación en un listado de las 100 ciudades con más población, PIB y turismo.El área metropolitana de Barcelona es la quinta concentración industrial de Europa, con uno de los ámbitos metropolitanos más dinámicos del continente en el que destacan los clústeres del automóvil, el farmacéutico y químico, los productos alimentarios, los materiales y equipos electrónicos, el del papel y las artes gráficas, y el tratamiento de residuos.En este escenario, la logística, en tanto que sector transversal, emerge como clave para la economía, haciendo por un lado más competitivo al tejido productivo de la zona y ejerciendo de elemento catalizador para la introducción en el área de influencia de Barcelona de los productos llegados de todo el mundo.