Participar de dicha transformación y traducirla en una oferta acorde a las necesidades es uno de los objetivos de los profesionales de la logística que pasan por CERSAIE, certamen que hoy cerrará sus puertas. Las organizaciones logísticas toman buena nota de los nuevos requerimientos y de los mercados hacia donde se dirige la exportación cerámica. Si la crisis pasó factura a los destinos tradicionales, la tímida recuperación económica ha vuelto a activar zonas como Estados Unidos, Arabia Saudí, Caribe o Extremo Oriente. Por contra, países emergentes que habían permitido aguantar el tirón sufren ahora los efectos de la recesión. Algunos tan importantes como Rusia, que lidera las caídas de las exportaciones con cerca de un 50% menos en su volumen de facturación.
Nuevos países significan nuevas oportunidades y, a su vez, nuevos retos ya que se deben organizar las cadenas de suministro, además de solventar posibles incidencias aduaneras o arancelarias.La satisfacción de expositores y visitantes se hace patente, no sólo a la salida del recinto, sino que se respira en el ambiente. Un ambiente dominado por las reuniones, citas y encuentros de trabajo, donde la competencia es más que dura y donde todos exponen, orgullosos, sus últimos productos y diseños.CERSAIE genera negocio, más de cien mil personas pasan por Bolonia en cinco días, y los logísticos españoles están atentos para que los fabricantes de nuestro país puedan seguir siendo competitivos en un mercado global que cada vez tiene menos barreras.