Todos los participantes en la mesa redonda, preguntados por si habrá un III Acuerdo General y si se logrará sacar a los convenios provinciales de las prórrogas, se mostraron convencidos de ello e insistieron en su voluntad de diálogo y negociación. Ahora bien, a la hora de detallar sus posturas, dejaron bien claras las importantes diferencias de método y de concepto que hacen ahora mismo imposible un acuerdo.Tal y como puso de manifiesto David Solana, socio de Gestiona 2, “el sector sigue bloqueado. Es tiempo de negociación pero se necesitan nuevos ámbitos temporales y territoriales y no seguir prorrogando los convenios dando una patada hacia adelante”. Convenios provinciales que no son puestos en discusión por los sindicatos, que en cambio se quejan, como hizo Mario Martín, de Comisiones Obreras, de las deslocalizaciones empresariales de una a otra región en pos de un convenio más favorable.Martín,que rechazó que haya que cambiar de paradigma y reclamó que antes de abordar la negociación se reflexione acerca de qué sector se quiere, aseguró que no hay un problema de base en la negociación colectiva pues “en los centros de trabajo se están llegando a acuerdos de forma natural y sobrada”, consecuencia que David Solana achacó precisamente al bloqueo del acuerdo general, lo que incita a soluciones particulares.Estas soluciones, tal y como expuso el representante de Comisiones Obreras, son incluso defendidas por las propias empresas, que “son incapaces de defender una propuesta global en materias como la flexibilidad pues no quieren compartir sus soluciones internas al considerarlas un factor de su competitividad”.Ahora bien, para David Solana, precisamente “si no logramos acuerdos firmes a nivel sectorial será muy difícil abordar los nuevos retos sectoriales de competitividad”.En materia de flexibilidad, Emilio Cardero, de UGT, se mostró a favor, “pero siempre flexibilidad controlada y para contratos indefinidos”, mientras que en cuanto a productividad, rechazó su vinculación al salario al considerar “complicada” su evaluación.Ante la falta de avances en la negociación colectiva, fueron varias la intervenciones que señalaron a la otra parte como responsable. Mario Martín aseguró que “los sindicatos hemos demostrado que no se nos puede culpar” y acusó a la patronal de trasladar a la negociación sus diferencias y querer ganar la representatividad que no se le reconoce por la vía de firmar convenios, como dejó entrever que hizo UNO con el convenio de operadores logísticos.Por su parte, David Solana le recordó a los sindicatos que también tienen su responsabilidad y que hay que revisar el modelo de negociación provincial y el propio contenido de los convenios, así como poner sobre la mesa los temas que todos evitan tratar.En el caso del convenio de Madrid se puso de manifiesto desde el auditorio que gran parte del problema está en la división de las patronales (transportistas y operadores logísticos) que además actúan como proveedores y clientes.