Cada día se hace más patente la necesidad de encontrar las soluciones más optimas no sólo para el productor hortofrutícola, garantizando que su producto llegue a su destino en las mejores condiciones posibles, sino también para el consumidor. Para ello algunas empresas, como Kuehne+Nagel, están desarrollando sistemas avanzados de visibilidad y trazabilidad que permiten, por ejemplo, monitorizar y controlar en tiempo real la temperatura del producto durante todo el proceso.La mejora de la eficiencia de los procesos es clave no sólo para reducir los costes, sino también para generar el menor impacto posible en el medioambiente. Por ello eficiencia y sostenibilidad van unidos. En este sentido, y como señala ARECO en referencia a la jornada "Cómo mejorar la eficiencia en la logística hortofrutícola, desde el productor al consumidor final", organizada por Logistica Profesional en la última edición de Fruit Attraction en Madrid, empresas como Polymer Logistics defienden la utilización de envases y sistemas de embalaje reutilizables porque son más resistentes y, por tanto, sufren menos desperfectos durante el transporte; también porque, por su diseño, permiten respirar al producto y evitan que se formen mohos u otras sustancias; y porque, al ser plegables, apilables y tener tamaños y formatos estandarizados y compatibles, optimizan el espacio, sobre todo en la logística de retorno (cuando el camión vuelve con cajas vacías), lo que reduce los costes.Lo anterior demuestra, según ARECO, que apostar por la sostenibilidad es rentable, como confirmó en la mencionada jornada Vicente Molla, manager customer service F&V de Chep, empresa miembro de ARECO. Para Molla, "siendo más sostenibles se pueden ahorrar costes y no al contrario, como algunos piensan". Así, apunta a la sostenibilidad como un requisito clave y cada vez más presente en la negociación con la gran distribución, sobre todo en el centro y norte de Europa.Envases reutilizablesCon el sistema de envases y embalajes reutilizables de cajas, se reducen notablemente las roturas y los daños durante el transporte de frutas y verduras. A esta conclusión llega un estudio del Instituto Fraunhofer para el flujo de materiales y la logística (IML), que cita ARECO y que fue presentado por la fundación alemana que promueve la reutilización de los envases, la Stiftung Initiative Mehrweg (SIM).La Comisión Europea estima que en Europa se desperdician aproximadamente 89 millones de toneladas de alimentos al año, y sitúa a Alemania a la cabeza de los países que más comida desperdician, con 10,7 toneladas, y a España en sexto lugar con 7,7 millones. Aunque el desperdicio se produce principalmente al final de la cadena de suministro de alimentos (venta minorista y consumidor), también existen pérdidas en la cadena de producción y de distribución.Son estas pérdidas en la distribución de los alimentos las que se analizan en el estudio del Instituto Fraunhofer, que, tomando como referencia el deterioro del embalaje en las entradas de mercancías de almacenes centrales y puntos de venta al por menor, inspeccionó más de 78.000 unidades de embalaje de transporte, el 52% reutilizables y el 48% desechables.Los daños producidos en el transporte desde los productores hasta la distribución varían sustancialmente dependiendo del tipo de envase que se use. Así, el porcentaje de rotura en los envases de cartón de un solo uso a lo largo de toda la cadena de suministro fue del 4,2%. Por el contrario, el porcentaje de rotura en las cajas reutilizables fue de sólo el 0,1%.El deterioro de estos envases va ligado en parte al deterioro de los bienes transportados y, por tanto, a la pérdida de alimentos. Mediante el empleo de envases reutilizables se pueden evitar sensiblemente estas pérdidas. El estudio hace un cálculo basándose en los niveles anuales de consumo de frutas y hortalizas frescas en Alemania, que cifra en unos 8,7 millones de toneladas, lo que representan unos 1.100 millones de cajas al año (considerando éstas los embalajes abiertos de plástico, madera o cartón para el transporte de frutas y verduras).Si se utilizaran únicamente cajas reutilizables en el mercado alemán, se perderían sólo 1.100 toneladas de fruta y verdura por un valor de alrededor de 2 millones de euros. Pero si se opta exclusivamente por envases y embalajes de un solo uso, la cantidad de pérdidas de estos productos ascendería a 36.000 toneladas, lo que equivaldría a unos 68 millones de euros.FRUTAS Y HORTALIZASEspaña es el primer proveedor de frutas y el segundo de hortalizas de Alemania, con unas exportaciones de 2,3 millones de toneladas1, lo que supone que unos 291 millones de cajas, más del 26%, corresponderían a productos españoles exportados a ese país.De esta manera, las exportaciones españolas que utilizaran exclusivamente envases desechables de un solo uso, sufrirían unas pérdidas de 9.500 toneladas de frutas y verduras por valor de unos 17,9 millones de euros. Mientras que si se hicieran solamente en cajas reutilizables, las pérdidas se reducirían a unas 290 toneladas y unos 520.000 euros.Según ARECO, si extrapolamos estos datos al total de las exportaciones españolas de frutas y verduras en el mundo (11,1 millones de toneladas en 2012 según FEPEX, por un valor de 9,6 millones euros), el ahorro de sustituir el transporte en envases desechables por el de envases reutilizables podría superar los 1.800 millones de euros, evitando la pérdida de más de 2 millones de toneladas de estos alimentos.