Este ambicioso proyecto, en el que se lleva años trabajando, podría conseguir este año la financiación necesaria para iniciar su desarrollo. La infraestructura básica de este Corredor Interoceánico consistiría en dos puertos de nueva construcción, situados uno en el océano Atlántico y otro en el Pacífico; un corredor ferroviario que los una para el transporte de las mercancías; un corredor energético para el movimiento de petróleo y gas; y un corredor tecnológico, sustentado en la fibra óptica.