La utilización del ferrocarril como modo de transporte complementario al marítimo para acercar o distribuir mercancías es un signo de identidad del Puerto de Bilbao y una firme apuesta de la comunidad portuaria, materializada en el hecho de que todas las terminales marítimas cuentan con su propia estación o apartadero ferroviario donde preparar los trenes, y en un incremento sostenido de las mercancías que llegan o dejan el puerto vizcaíno por esta vía. En 2012, el incremento del tráfico ferroportuario se cifró en un 3,7%. Así, sobre el conjunto del tráfico, el 4,2% de las mercancías utilizaron el ferrocarril frente al 49,7% de la carretera. Por oleoducto/gaseoducto se transportaron el 46,1% del total de mercancías.Esto significa que un total de 1.215.000 toneladas utilizaron el ferrocarril para entrar o salir del puerto por vía terrestre. Sin tener en cuenta los tráficos que no saldrán con transporte del puerto (petróleo, gas, muelles de la ría, etc), este volumen indica que realmente el 7% de las mercancías utilizaron el ferrocarril.En contenedores, el tráfico superó los 90.000 TEUs, lo que representa el 15% del tráfico de contenedores. La mercancía en convencional y a granel de los muelles comerciales que utilizó el ferrocarril representó el 13% del total de tráfico ferroportuario, con un importante descenso que fue compensado por el incremento del 28% de las toneladas en contenedor.Las cifras, en términos de volúmenes absolutos, señalan un tráfico récord e indican la apuesta decidida por utilizar para cada radio de acción el modo de transporte más conveniente y competitivo.Nuevo servicio con MurciaDesde el Puerto de Bilbao hay salidas/llegadas a Madrid, Burgos, Valladolid, Vitoria, Barcelona, Valencia, Zaragoza, Guadalajara (Azuqueca de Henares), Sevilla y Castellón. El último destino en incorporarse a esta oferta ferroviaria es Murcia, de la mano de MacAndrews. En 2012 se mantuvo el número de servicios ferroviarios y la apuesta por la diversificación de orígenes/destinos. A la vista de todos estos resultados, el desarrollo de los servicios multiclientes aún tiene margen de mejora para poder hablar de intermodalidad avanzada.