Aunque los camiones podrán circular por esta carretera durante unos días más, el conseller confía en que el trasvase del tráfico pesado a la AP-7 será una realidad en abril.Para que la obligatoriedad de circular por una carretera de peaje entre Maçanet y la frontera francesa no resulte tan onerosa para el sector del transporte, el conseller aseguró que se está negociando con el ministerio de Fomento y con la concesionaria Abertis, titular de la autopista AP-7, para que se apliquen bonificaciones del 50% a los camiones en el tramo afectado.Vila recalcó que la aplicación de estas bonificaciones supondrá "que la Generalitat aportará dinero para minimizar el impacto que tiene la prohibición de circular por una carretera que no es nuestra", sino del ministerio de Fomento.Pese a todo, el conseller de Territorio, que protagonizó el viernes la conferencia del Cercle d'Infraestructures, reconoció que esta medida no es la solución a los problemas que sufre la N-II, y que lo que hay que hacer es desdoblar la carretera. Aunque "cuando ésta esté desdoblada se aplicará la Euroviñeta", precisó el conseller.
EuroviñetaSobre este punto, Santi Vila dejó claro que la intención de la Generalitat de Catalunya es "incorporar la Euroviñeta" y, aunque por el momento ésta se aplicará en el Eix Transversal, "lo más lógico sería concebir íntegramente la gestión de toda nuestra red viaria. Costará explicar que incorporemos la Euroviñeta en el Eix Transversal -que es de titularidad autonómica- y no en la N-II -de titularidad estatal-", añadió Vila.El conseller recordó que "en otoño, nos caerá la Directiva europea y sería importante que el Gobierno del Estado tomara una determinación respecto a la aplicación del principio de quien contamina, paga".
Reconocimiento al puertoPor otro lado, el conseller reconoció la gran labor que se está desarrollando en el Puerto de Barcelona en pro del desarrollo logístico de Catalunya y de la internacionalización de las empresas y aseguró que este trabajo "forma pare de toda un estrategia con la que aspiramos a superar claramente nuestros límites administrativos" para poder servir como plataforma logística y de distribución a otros territorios que forman parte de un hinterland cada vez más amplio.Tras su comparecencia en el Cercle d'Infraestructures, Santi Vila se desplazó hasta la sede de la Autoridad Portuaria de Barcelona (APB), donde fue recibido por el presidente, Sixte Cambra, y donde el conseller mantuvo un encuentro con los máximos directivos del enclave, aprovechando para firmar en el libro de honor del puerto de la capital catalana.Posteriormente, el conseller realizó una visita a diferentes instalaciones portuarias, entre ellas a la Terminal de Contenidors de Barcelona (TCB) y a BEST, la terminal de Hutchison en el muelle Prat. La visita de Santi Vila al puerto, que realizó acompañado por el secretario de Territorio y Movilidad, Ricard Font; el director de los servicios territoriales del departamento en Barcelona, Xavier Berga; la jefa de Gabinete, Mar Jiménez, y el jefe de Comunicación, Quim Torrent, así como por la diputada en el Parlament de Catalunya, Meritxell Roige, concluyó en la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) en un encuentro con los miembros del consejo de administración y del comité ejecutivo de la autoridad portuaria catalana.Por parte de la APB, acompañaron al conseller durante la visita el presidente, Sixte Cambra; el director general, José Alberto Carbonell; el adjunto a la presidencia, Joan Colldecarrera; el subdirector general de Estrategia y Comercial, Santiago García-Milà, y la directora de Comunicación, Núria Burguera.