Según el presidente de ATEIA Gipuzkoa-OLT, Ricardo Ramos, la crisis económica, además de todas sus consecuencias negativas en términos de cierre de empresas y de destrucción de empleo, ha generado una situación “muy complicada” en las relaciones laborales de los diferente sectores, al no haber renovado las partes los diferentes convenios colectivos, por falta de acuerdo.De hecho, a partir de la aplicación de la última Reforma Laboral operada por el actual Gobierno en la Ley 3/2012, y en caso de no alcanzar un acuerdo para su renovación, Ramos advierte de que el día 7 de julio “perderá vigencia nuestro convenio provincial de empresas transitarias, remitiéndonos desde esa fecha, como marco de referencia a la aplicación del Estatuto de los Trabajadores, por no existir en este caso un convenio estatal”.Posición comprometidaEl presidente de la Asociación Empresarial de Transitarios de Gipuzkoa observa “con gran preocupación” un escenario “que nos haría retroceder muchos años en las relaciones laborales y situaría en una posición muy comprometida a todo el sector, especialmente a los trabajadores”. “No quiero ni imaginar -dice Ramos- la repercusión que podría suponer la aplicación de esta Ley en conceptos como los salarios, donde se tendría como referencia el salario mínimo interprofesional, la jornada laboral, las vacaciones y otros muchos puntos recogidos en el Convenio Colectivo”.Asimismo, “en contra de algunas opiniones sobre la falta de interés de la patronal a la hora de renovar convenios provinciales, situación que podrían suponer el recorte de derechos de los trabajadores”, Ricardo Ramos ha querido dejar claro el rechazo de esta postura desde la patronal que preside, al considerar que “lejos de mejorar las relaciones laborales esto únicamente las tensaría en exceso, al carecer de un marco de referencia válido”. “El tipo de empresa que representa nuestra asociación, por pertenecer al sector de servicios, tiene en gran medida basada su fuerza en el conocimiento y la capacidad de su personal, donde la conflictividad interna repercute negativamente y de forma directa en el servicio a nuestros clientes y no tengo ninguna duda que nuestros asociados es lo último que persiguen”, concluye el presidente de ATEIA Gipuzkoa-OLT.