En concreto, la modificación adapta la normativa para permitir que los vehículos de combustibles alternativos (gas natural, gas licuado, electricidad e hidrógeno, principalmente) puedan aumentar hasta en una tonelada su Masa Máxima Autorizada (MMA). De este modo, compensarán el aumento de peso (tara) que estos vehículos traen de serie respecto a los tradicionales debido a las tecnologías y equipos que utilizan. UNO considera muy positiva esta medida ya que, hasta ahora, las empresas de logística que utilizaban estos vehículos para el reparto de mercancías se veían obligadas a transportar menos carga.