En el marco de la visita a esta terminal, que conecta España y Portugal con el resto de Europa, Alberto Ambrogio, director de la compañía, explicó de forma amena y detallada los pormenores de este sector de actividad empresarial relacionado con la logística intermodal. Los principales retos a los que se enfrentan son las elevadas inversiones en infraestructuras, así como la escasez de chóferes y el respeto al medioambiente. Asimismo, Alberto Ambrogio comentó que de cara a la optimización de los servicios intermodales sería deseable que las composiciones ferroviarias pudieran alcanzar los 1.000 metros de longitud (en lugar de los 750 metros actuales del tren estándar europeo), y se pudiera incrementar asimismo la carga de 1.600 a 2.000 toneladas. Su modelo de negocio, a diferencia de otras terminales, está basado "en una flota de cajas móviles completamente de propiedad y en terminales privadas gestionadas con plena autonomía operativa".