Portugal cuenta con casi 2.600 km de red ferroviaria que une las principales ciudades del país. Entre Lisboa y Oporto la línea es doble y está electrificada, y se está construyendo la nueva línea de Alta Velocidad Lisboa-Oporto, cuya inversión hasta 2030 ronda los 4.900 millones de euros. Así, el proyecto inicial de Alta Velocidad Lisboa-Madrid, ha sido sustituido por otro cuya prioridad es la de facilitar al máximo el acceso de las mercancías portuguesas a los mercados europeos, vinculando el tráfico de pasajeros al de mercancías.
Ferrovia 2020, el Plan de Inversión Ferroviaria presentado por el Gobierno en 2016, definió un conjunto de prioridades con especial énfasis en los compromisos internacionales, incluidos los bilaterales con España y los resultantes del Corredor Atlántico; la promoción del transporte de mercancías y en particular de las exportaciones, y la coordinación entre los puertos nacionales y las principales fronteras terrestres con España. En noviembre de 2022 el Gobierno presentó el Plan Ferroviario Nacional (PFN), que contempla cuatro conexiones de alta velocidad de pasajeros y dos nuevos corredores de mercancías hasta la Raya, la frontera con España. Así, el PFN plantea un corredor de trenes de mercancías de 1.500 metros de longitud entre Sines y Badajoz, como medida para conectar con el resto de Europa y los puertos españoles del Mediterráneo.
Plan Ferroviario Nacional (PFN)
Así, se prevé la construcción de nuevos corredores ferroviarios internacionales para mercancías dado el aumento previsto del tráfico. Estos nuevos corredores de mercancías coinciden con la nuevas líneas para servicios de pasajeros que están previstos en el PFN. Por tanto, a la hora de diseñar estas líneas se deberá tener en cuenta su posible utilización para el transporte de mercancías, si en su momento resulta relevante.
Para alcanzar el objetivo de una cuota modal ferroviaria del 40% en el transporte de mercancías, es probable que, a largo plazo, las líneas transfronterizas existentes no sean suficientes Así, la nueva línea Trás-os-Montes cumple la función de conectar a los viajeros con dos capitales de distrito, Vila Real y Bragança, actualmente sin servicio ferroviario, y podría crear un nuevo corredor internacional de mercancías capaz de complementar la capacidad de la Línea Beira Alta y la Línea Miño para conectar el Centro y Norte del país con España y Europa.
Conexión con el Mediterráneo con trenes de 1.500 metros
Por otra parte, la construcción de una nueva línea de viajeros que unirá el Algarve con Andalucía ofrece la oportunidad de conectar el sur del país con el Corredor Mediterráneo para el transporte de mercancías. Esta línea conectaría los puertos de Sines, Setúbal y Lisboa con los puertos españoles del Mediterráneo, y con el corredor transeuropeo del Mediterráneo a través de Sevilla con conexión con España y Europa a través de la Cuenca Mediterránea.
Aunque aún queda mucho trabajo para generalizar los trenes de mercancías de 750 metros, no sólo en Portugal, sino en toda Europa, longitud que dista de lo que es el límite operativo y tecnológico del ferrocarril, como se ha demostrado en Norteamérica. Así, en un escenario de fuerte crecimiento del transporte ferroviario de mercancías, en particular el que se realiza en conexión con los puertos, se podría considerar la creación de corredores ferroviarios para trenes de 1.500 metros de longitud. En particular, dado el crecimiento previsto del Puerto de Sines, su conexión con la frontera Elvas-Badajoz sería un primer corredor natural para la implantación de trenes de 1.500 metros. Esto sólo será ventajoso si este corredor continúa en España hacia otro destino de igual importancia, como los puertos del Mediterráneo.