Las zonas francas integrantes de la World Free Zone Organisation (WFZO) preparan ya su transformación en hubs innovadores “que fomenten la actividad económica en sus territorios y evolucionen más allá de su rol tradicional como entornos de importación y exportación no sometidos a los aranceles aduaneros”.
Esta ha sido una de las conclusiones extraídas del 5º Congreso Mundial de las Zonas Francas, celebrado la última semana de junio en Barcelona en paralelo al Salón Internacional de Logística (SIL).
La WFZO añade que, ante la globalización y la digitalización del comercio internacional, los agentes del sector defendieron en el congreso que las zonas francas y el resto de áreas industriales “deben comprometerse con la sostenibilidad del planeta e integrarse cada vez más en las ciudades con una urbanización más humana y ecológica”, unas líneas estratégicas que coinciden por las marcadas por la Zona Franca de Barcelona para su desarrollo a corto y medio plazo.
El evento, que reunió a centenares de líderes de las principales zonas francas mundiales, abordó el cambio de paradigma que la globalización y la digitalización están introduciendo en los procesos productivos y comerciales de todo el mundo.
Tras una primera jornada dedicada a seminarios de liderazgo con la participación de altos ejecutivos de las zonas francas mundiales, los dos días posteriores del congreso incluyeron la celebración de varias sesiones de debate con expertos internacionales del sector procedentes del ámbito profesional y académico.
Bajo el lema “Free Zone 4.0 Meets Economy 4.0”, en el congreso se abordó la logística 4.0, el e-commerce, el e-learning, la transparencia y la economía. Entre los ponentes, cabe destacar la presencia de Joan Clos, ex alcalde de Barcelona y ex director ejecutivo del Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos; Cristina Gallach, alta comisionada para la Agenda 2030 de la ONU en España; Erik Autor, presidente de la Asociación de Zonas Francas de Estados Unidos; Eesa Bastaki, presidente de la Universidad de Dubai, Juan Pablo Rivera, presidente de la Zona Franca de Bogotá.
Coincidiendo con el 5º Congreso Mundial de las Zonas Francas, se celebraron en paralelo en la ciudad el SIL 2019, el eDelivery Barcelona Expo & Congress y el InTrade Summit BCN, que engloba el Congreso de Alacat, el Congreso Internacional de OEAs Aduaneros y Logísticos, el MedaLogistics Summit y el encuentro de la Asociación de Zonas Francas de las Américas (AZFA).
Desde la WFZO recuerdan que “todos estos eventos favorecieron la presentación de la Declaración de Barcelona, que defiende en diez puntos la cooperación y el desarrollo económico internacional”. En el citado manifiesto se defienden los objetivos de la Agenda 2030, pues “la sostenibilidad es una necesidad y una oportunidad” y se apuesta por un “cambio de modelo productivo hacia la eficiencia de recursos”.
A su vez, se reivindica el papel de las zonas francas “para estimular el crecimiento de muchas regiones” y se sostiene que “el comercio no es un arma, sino un verdadero instrumento de paz y prosperidad que ha de permitir un crecimiento inclusivo”. En este sentido, la Declaración de Barcelona establece que el futuro del comercio internacional “depende de no levantar nuevos muros sino de construir puentes y crear espacios de encuentro”.
Esta era la primera vez que el congreso se celebraba en Europa y los encargados de inaugurarlo, encabezados por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, coincidieron en destacar la importancia de que Barcelona acoja un evento de estas características,” perteneciente a un sector económico muy relevante, el de las zonas francas, que genera un tercio del comercio internacional y aporta unos 70 millones de puestos de trabajo a nivel mundial”.