En el primer trimestre de 2025, la economía española mantuvo la senda de crecimiento pese a cierta ralentización con respecto a los meses precedentes. El PIB creció un 2,8% frente al crecimiento del 3,3% registrado en los trimestres previos de 2024, con el comercio exterior sometido a los vaivenes generados por las amenazas arancelarias proferidas desde Estados Unidos por Donald Trump.
En este periodo, las exportaciones en valor crecieron un 2,6% frente al incremento de las exportaciones en volumen del 0,8%. Más claro fue el impacto en las importaciones, que se dispararon medidas en valor hasta crecer un 9,3%, elevándose a su vez las importaciones en volumen un 12,5%.
Tráficos
Desde el punto de vista operativo, el comportamiento de los distintos modos logísticos fue dispar, dadas las sendas de evolución que se arrastraban. En cuanto al transporte marítimo, los puertos españoles redujeron sus tráficos en el primer trimestre del año un 1,2% fruto del frenazo de los contenedores y culminando la progresiva desaceleración vivida a lo largo de 2024. Por su parte, también se desaceleró de forma notable el transporte aéreo de mercancías, si bien su crecimiento del 5,4% en el arranque del año sigue siendo muy positivo pese a no crecerse de momento a doble dígito. También positivo fue el dato del transporte ferroviario de mercancías. Renfe siguió sumida en una alarmante pérdida de tráficos pero otros operadores como Medway lograron compensar esta situación y permitir un crecimiento global en el primer trimestre del 1,9%.
En cuanto al transporte de mercancías por carretera, mantuvo la senda positiva con un crecimiento del 6,6%, muy sustantivo pese a las diferencias en la evolución del tráfico internacional y el nacional.
Cifra de negocios
En este contexto cobran importancia los datos de cifras de negocios del sector del transporte y el almacenamiento publicados por el INE, que mostraron en el primer trimestre del año un crecimiento del 6,3%. Los sectores más dinámicos fueron, como viene siendo habitual, el almacenamiento y las actividades anexas al transporte, con un crecimiento del 7,9%, así como el transporte aéreo con un crecimiento del 7,8%. Por su parte, en cuanto a ingresos, los menores crecimientos se registraron en el transporte ferroviario (+1,1%) y en el correo (+3,5%).
La cifra de negocios del transporte de mercancías por carretera creció un 4,9%, mientras que en el caso del transporte marítimo el incremento fue del 6,1%.