Tras la decisión adoptada unánimemente en el Consejo de Administración de Nasuvinsa, los servicios jurídicos de la sociedad pública (absorbente de la extinta CTP S.A.) hicieron efectiva el pasado lunes la notificación fehaciente de la rescisión del contrato, alegando que los continuados incumplimientos del mismo estaban ocasionando graves perjuicios a los intereses públicos y al propio desarrollo del parque de Imarcoain.
Entre las diferentes causas alegadas por Nasuvinsa en la notificación de la resolución, destacan los impagos del canon que la UTE debía abonar a la sociedad pública por los derechos de superficie y explotación (7,4 millones de euros de deuda y otros 1,5 millones de intereses), así como de los gastos de comunidad, cuyos retrasos ascienden a más de 700.000 euros por 63 cuotas impagadas.
Titularidad plena
Nasuvinsa subraya también que la UTE adjudicataria lleva sin comercializar ni acometer ninguna implantación empresarial en la tercera fase de la Ciudad del Transporte desde el año 2013, ni tampoco ha terminado de urbanizar completamente los terrenos, pese a que el contrato así se lo exigía en un plazo máximo de tres años a partir de 2006.
La resolución del contrato y su notificación fehaciente permite a la sociedad pública Nasuvinsa recuperar la titularidad plena sobre los terrenos pendientes de comercialización de la tercera fase de la CTP y hacerse cargo de las obras de urbanización y edificación inconclusas.