“Empapado” de logística culminó ayer el ministro de Transportes, Óscar Puente, su primera visita al SIL, que inauguró su edición de 2024 con un recorrido marcado por la coyuntura política y las nuevas tendencias sectoriales de un ámbito clave en su negociado.
madrid. “Pensé que me ibas a hablar de Rodalies”, le dijo Óscas Puente a la consellera Ester Capella al término del acto, “pero has preferido hablar del Corredor Mediterráneo y ahí te puedo decir que vamos muy bien. No es así como tú dices”, insistió Puente.
Y es que la consellera de Territori, en los parlamentos del acto oficial, no sin antes mostrar su estima por Puente, había reprochado al ministro que el Corredor Mediterráneo es “ejemplo de mala gestión y falta de determinación” por la “desidia en la ejecución, el déficit en la inversión y el incumplimiento de plazos”.
“Jo t’estimo molt també. ¿Se dice así?”, respondió con fina ironía el ministro a la consellera para recordarle que desde 2018 se han invertido 6.500 millones en el Corredor con un 70% ya ejercutado o en ejecución, al tiempo que dejó a continuación el mensaje más político de la mañana: “Te pido consellera que sigáis apoyando al Gobierno de España para marcar la diferencia en Catalunya”.
El ministro Óscar Puente defendió que “no habrá descarbonización sin crecimiento ni tampoco crecimiento sin descarbonización”
Estas palabras no pueden sino entenderse en el contexto de la situación política de Catalunya y España, con un Gobierno del que forma parte Puente que necesita en Madrid los votos del partido de Capella, ERC, que a su vez está de salida del Gobierno de Catalunya como evidenció la propia Capellas, en un clima de indefinición aún más acrecentado si cabe pues estamos en plena campaña a las puertas de las elecciones europeas que se celebran en este mismo domingo.
De ahí también que ayer el SIL viera multiplicada con respecto a otras ediciones la presencia de representantes políticos de toda orden y condición, entre ellos el socialista Salvador Illa, líder del partido más votado en las recientes elecciones catalanas y que no perdió la oportunidad de asistir al SIL.
Lo mismo que el alcalde de Barcelona, Joan Collboni, acompañado de uno de sus predecesores, Joan Clos, y numerosos representantes públicos que aguardaron en medio de un fuerte calor la llegada al evento del ministro Puente, quien durante su discurso dejó un gran eslogan para los tiempos venideros sectoriales: “No habrá descarbonización sin crecimiento ni tampoco crecimiento sin descarbonización”.
Estas palabras sucedieron a la acertada puesta en valor del premio que recientemente ha otorgado Naciones Unidas a Usyncro y que el ministro puso como ejemplo de que en España se hacen muy bien las cosas.
Más allá de este apunte, poca logística hubo en el discurso de un ministro que, al revés que en el reciente Congreso CETM, desembarcó en el SIL acompañado de una parte más que relevante de su equipo, desde Marta Serrano, secretaria general de Transporte Terrestre, hasta Roser Obrer, directora general de Transporte por Carretera y Ferroviario, pasando por los comisionados de los Corredores Atlántico y Mediterráneo, del presidente de Adif (quien no dudaba en lamentar en los distintos corros las “patrañas” que le implican en el “caso Koldo”) y el presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena, que está a punto de estrenar nueva directora de la Secretaría General y que se mostró especialmente activo durante todo el recorrido informando al ministro de la razón de ser de muchos de los stands visitados, dado su profundo conocimiento del sector logístico.
Un ministro quien atendió a los medios de comunicación al inicio de su recorrido sin poder responder a otra cosa que no fueran asuntos en clave de política general: la imputación de Begoña Gómez, el estado de Pedro Sánchez y su enésimoa polémica twitera, en este caso a cuenta de la utilización de los carteles de la asociación SOS Desaparecidos como plantilla para plasmar en la misma a la candidata popular al Parlamento Europeo: Dolors Monserrat.
A partir de aquí inició el ministro una visita de más de dos horas a una perfectamente calculada selección de stands del SIL como reflejo de las tendencias que marcan la logística en estos momentos.
Así tienen especial valor su recorrido por los stands de BP y Repsol, con una más que destacada presencia en esta edición para poner en evidencia el enorme peso de las energías renovables en la transformación logística presente y futura.
También muy relevante fue su visita a Trasmed, Balearia y GNV, dado el papel del transporte marítimo de corta distancia en las cadenas intermodales. En el caso de Balearia fue el propio ministro quien recalcó su conocimiento de que el “40%” de la mercancía que entra y sale por los puertos es ferroviaria.
En esta línea, el ministro conoció de primera mano la apuesta por las autopistas ferroviarias con Transitalia y VIIA.
En el caso de VIIA, lo mismo que en el stand de Arabia Saudí y de BEST Óscar Puente demostró con los distintos responsables su perfecto dominio del inglés.
En su visita al stand de Aragón, el consejero de Fomento, Octavio López, insistió a Puente en la trascendencia de poner en marcha la Travesía Central Pirenaica.
Durante su presencia en el stand del Puerto de Tarragona Puente conoció el liderazgo del enclave catalán en tráficos como los agroalimentarios, que es uno de los aspectos más subrayados por Rodríguez Dapena
Mientras, en el stand del Puerto de Barcelona, Puente se interesó sobre todo por la apuesta digital y los proyectos puerto y ciudad.
El ministro también visitó el stand de Embalex, cuyos responsables tenían preparado ex profeso vino tinto de Valladolid para brindar con Óscar Puente.
También hay que destacar la visita al stand de BEST, donde su máximo responsable, Guillermo Belcastro, recordó al ministro Óscar Puente que se habían conocido en noviembre en la gala del 30 Aniversario de Grupo Diario.
El ministro realizó una visita de más de dos horas a una perfectamente calculada selección de stands del SIL como reflejo de los retos logísticos actuales