LOLI DOLZ
Las empresas fabricantes del sector cerámico español han destinado esfuerzos ingentes en 2022 para mantener producción, ventas y empleo en un contexto complejo. Ahora se preparan para un 2023 complicado. No obstante, como subraya el presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (ASCER), Vicente Nomdedeu, “somos una industria que en una coyuntura normal tiene un nivel muy elevado de competitividad. La capacidad exportadora de la industria azulejera española está más que demostrada”.
El actual contexto, lo más importante es conocer cómo están las empresas del sector cerámico español. ¿Cómo están? ¿Cuáles son sus principales preocupaciones?
Las empresas de nuestro sector están muy afectadas por la crisis energética que se inició a finales 2021 y que se ha visto agravada en 2022 a causa de la guerra en Ucrania.
Las empresas han destinado esfuerzos ingentes en 2022 para mantener producción, ventas y empleo en un contexto complejo, pese a todo las cuentas de resultados están debilitadas ya que estimamos que casi 1 de cada 2 euros que se han facturado en 2022 se han destinado a pagar la factura energética.
Se han incrementado los precios, pero sin repercutir el 100% de la subida de costes de producción, sin embargo, la demanda se ha resentido y nuestros productos han perdido competitividad. La demanda se ha frenado en mercados de fuera de la UE, puesto que nuestra competencia de terceros países ha mantenido precios, pero también -y más preocupante- hemos perdido competitividad artificialmente en el mercado europeo a causa de los desequilibrios en las ayudas estatales que reciben otros productores como los italianos.
En diciembre, trasladaron su incertidumbre ante el texto del RDL 20/2022, de 27 de diciembre, ¿ha habido novedades?
Hasta el momento no hay novedades. Nos consta que se está trabajando en la orden ministerial con la concreción de las ayudas, pero seguimos esperando. Nos preocupan los plazos en los que se reciban las ayudas, puede que lleguen demasiado tarde.
Se han incrementado los precios, pero sin repercutir el 100% de la subida de costes de producción, sin embargo, la demanda se ha resentido y nuestros productos han perdido competitividad
¿Ya está funcionando la Mesa de la Cerámica que anunció el president de la Generalitat, Ximo Puig? ¿Se ha agilizado el plan de ayudas y que contempla destinar 5.000 euros por trabajador para paliar los efectos de la crisis energética sobre este sector económico?
Esta es otra vía en la que estamos trabajando junto con la Generalitat para que puedan complementar las ayudas que se reciban desde el gobierno de España. El contacto es continuo y esperamos que a lo largo de febrero se publiquen las ayudas autonómicas, la agilidad en la definición y en la llegada de las ayudas es vital para las empresas.
Futuro
En el actual escenario internacional y nacional, ¿qué previsiones tienen para el presente ejercicio?
Somos una industria que en una coyuntura normal tiene un nivel muy elevado de competitividad. La capacidad exportadora de la industria azulejera española está más que demostrada. La evolución de las cifras del sector, en estos momentos, está supeditada a la llegada de las ayudas directas y a la estabilización del precio del gas, solo así podremos revertir la situación de pérdida de competitividad en los mercados y solventar el problema de tesorería de las empresas.
EL DATO
5.700
MILLONES
Las previsiones de cierre de 2022 de ASCER son de 5.700 millones de euros de facturación total, de los cuales 4.300 millones de euros son de exportación. En producción, se rondarán los 500 millones de metros cuadrados.
¿Cuál es el escenario en el tema de las materias primas?
En cuanto a materias primas, afortunadamente en 2022, más allá del incremento del coste de las mismas, no hemos sufrido desabastecimiento como sí ha sucedido en otros sectores.
Sé que las circunstancias internacionales son complejas, pero ¿cómo cree que podrían mejorarse las exportaciones españolas?
La competencia mundial es grande, competimos con países con menores precios de energía y legislaciones más laxas. Y también competimos dentro de la UE con países con mayor apoyo de sus gobiernos, lo que aumenta la brecha artificialmente. Es importante que todos juguemos con las mismas reglas de juego.
También competimos con otros productos sustitutivos con menores costes productivos, aunque con peor rendimiento a lo largo de su ciclo de vida. Soy un firme defensor de las ventajas y beneficios que la cerámica como material aporta a la construcción y a la arquitectura sostenible.
En este punto, toca hablar de las infraestructuras pendientes y urgentes que permitirían mantener la distribución y servicio a los clientes del sector, aportándoles competitividad, y que el año pasado ya estaban pendientes...
No es que sigan siendo determinantes, hoy le diría que lo son todavía más puesto que son un factor que suma competitividad a un sector. En un momento en que estamos perdiendo competitividad por desigualdades en el apoyo a la industria, no nos podemos permitir que el no contar con las infraestructuras adecuadas suponga una mayor merma en nuestra competitividad frente a otros productores de otros orígenes.
En su opinión, ¿cuáles son las infraestructuras que más necesitan?
La mejora en los puertos, tanto en el de Valencia (salida de producto terminado) como en el de Castellón (entrada de materias primas); el desarrollo de sus respectivos accesos; la estación intermodal; y la potenciación del tráfico de mercancías a través de ferrocarril, etc. etc.
Hemos logrado reducir nuestras emisiones el máximo que podemos lograr aplicando las mejores tecnologías disponibles actualmente
Sostenibilidad
¿Cuáles son los principales retos a los que deben enfrentarse las empresas cerámicas pensando en el mañana?
Pensando en el medio-largo plazo, sin duda alcanzar los objetivos de descarbonización es nuestro principal desafío. Hemos logrado reducir nuestras emisiones el máximo que podemos lograr aplicando las mejores tecnologías disponibles actualmente.
El margen de mejora es limitado
y para lograr mayores reducciones de emisiones de CO2 son necesarios cambios tecnológicos disruptivos aún en fase de investigación, pues no existe actualmente una alternativa energética viable - tanto a nivel técnico como competitivo - al gas natural para atender la demanda térmica de la industria.
En el sector tenemos en marcha diferentes iniciativas de I+D+i para desarrollar la tecnología necesaria y poder realizar pruebas piloto a nivel industrial mediante la electrificación de parte de los procesos y el uso de hidrógeno verde, pero son desarrollos todavía en fase embrionaria. Lamentablemente en nuestra industria vamos a necesitar márgenes temporales más amplios para alcanzar los objetivos.
La energía y la adaptación de la industria para alcanzar los objetivos de descarbonización ¿Siguen siendo un gran desafío? ¿Las administraciones son conscientes de ello? ¿Ayudan?
La crisis energética, agravada por la invasión rusa de Ucrania, ha provocado escasez de combustible y alzas desmesuradas de los precios, poniendo el foco en la importancia de abandonar cuanto antes la dependencia de los combustibles fósiles y apostar por las energías renovables.
La energía, tanto la generación, el suministro y su coste, se han convertido en uno de los principales desafíos para la competitividad de la industria. Por ello, es necesario definir una estrategia energética que responda a las particularidades y necesidades de la industria, con el apoyo de la Administración a todos los niveles, de forma que pueda garantizarse su competitividad y capacidad de generar empleo, al mismo tiempo que permita la transición necesaria, de una forma justa
y equilibrada.
Para lograr los objetivos de descarbonización, no cabe la menor duda que será necesario realizar inversiones millonarias en infraestructuras y tecnología tanto por la parte privada como pública.
El pasado año nos comentó que la oferta de profesionales técnicos formados tanto para trabajar en las plantas, como para colocar el producto en obra era insuficiente. ¿Sigue siendo así?
Sigue siendo un problema, existe una falta de vocación para trabajar en oficios y si nos centramos en la oferta de colocadores formados es del todo insuficiente. Es un problema que encontramos a nivel europeo y nos preocupa puesto que nuestro producto no está realmente acabado hasta que está correctamente colocado.
“La producción retrocede un 15% volviendo a niveles de 2019”
¿Cómo ha ido el año 2022? ¿Se cumplieron las peores previsiones?
Los datos de 2022 no son positivos y están muy afectados por el alza del coste del gas, un factor externo que escapa totalmente a la capacidad de influencia. Pese a que la facturación estimamos que crecerá en torno a un 17%, hay que tener en cuenta el resto de indicadores puesto que los datos en valor están sobrestimados por la inflación y no se traducen en beneficios.
La factura energética sectorial estimamos que será de alrededor de 2.235 millones de euros, el 40% de lo que estimamos que facturará el sector (5.700 millones de euros). La producción retrocede un 15% volviendo a niveles de 2019, muy lastrada por el alza en el coste de la energía y materias primas. La exportación crece en valor, pero en volumen cae en torno a un 12%, con países clave para Tile of Spain con disminución en la demanda.
Según el reciente estudio elaborado por PwC la cuenta de resultados a nivel sectorial en 2022, en base a la estimación de ingresos y los costes calculados muy afectados por los incrementos en los costes de la energía y las materias primas, registrará una caída del EBITDA de 36 puntos porcentuales pasando de un EBITDA positivo de 16% a un EBITDA en negativo de -20%.
“La situación económica compleja ha obligado a las empresas a replantearse su actividad promocional”
¿Qué esperan de Cevisama? ¿Cuáles son los valores de asistir a eventos como estos?
Cevisama es el foro de encuentro para que expositores y compradores, distribuidores, arquitectos, prescriptores, diseñadores, interioristas, todo el conjunto de stakeholders del sector se encuentren en un mismo momento y lugar. Las perspectivas de afluencia de visitantes son buenas y nos constan los esfuerzos que desde la Feria se están llevando a cabo para atraer compradores.
Dicho esto, desde la última edición de Cevisama, en 2020, han sucedido muchas cosas y ha habido cambios profundos en la forma de hacer. La pandemia y la imposibilidad de celebrar eventos presenciales multitudinarios aceleró la digitalización de las empresas y obligó a buscar alternativas y nuevas formas de promocionar los productos entre los clientes internacionales. Las empresas constataron que podían seguir haciendo promoción internacional sin asistir a ferias y poniendo en marcha otras herramientas.
En esta edición, la situación económica compleja ha obligado a las empresas a replantearse su actividad promocional y a optimizar sus recursos y como consecuencia son numerosas las bajas en la participación. Las empresas son ahora más selectivas con sus inversiones en acciones promocionales, y buscan aquellas inversiones que mayor rentabilidad y valor diferencial les ofrezcan.