Esto supuso para la dársena de El Grao perder algo más de dos millones de toneladas provocado, en parte, por la caída del movimiento de mercancía general, que bajó un 33,98%, influido a su vez por la pérdida de 71.875 TEUs (-35,44% respecto 2019). El tráfico de graneles también se vio afectado: mientras que los sólidos bajaron un 5,22%, los líquidos lo hicieron casi siete puntos y medio.
Con estos datos, el objetivo principal de la Autoridad Portuaria de Castellón para 2021 es trabajar para recuperar cuanto antes los tráficos perdidos durante la pandemia.