La incertidumbre generada el año pasado por la crisis sanitaria tuvo su reflejo en las estadísticas de tráfico del puerto asturiano, con un total de 4,11 millones de toneladas manipuladas que supusieron una caída del 20% respecto al año anterior.
En todo caso, como recuerda Rodríguez Vega, la situación no fue tan negativa como en un principio se temió ya que las previsiones apuntaban a caídas superiores al 20%. El descenso estuvo muy concentrado en los tráficos siderúrgicos, la actividad industrial más afectada, especialmente por las paradas en los hornos de Arcelor, que produjeron la reducción de todas las salidas de productos elaborados.
Por otra parte, el presidente del Puerto de Avilés señala que en 2019 se registró un tráfico de importación de slabs para Arcelor mayor del habitual, “lo que contribuyó en buena parte a distorsionar los tráficos de 2020”.
Reparto de tráficos
En el repaso a los tráficos de 2020, los productos siderúrgicos se revelaron determinantes, ya que las caídas del mayor cliente del puerto, Asturiana de Zinc, fue más coyuntural, manteniendo los niveles de producción habituales. Por su parte, los volúmenes de graneles, carbones, coque, etc., estuvieron en niveles razonables. “Esa creo que va a ser la tónica para 2021”, dice Rodríguez Vega, pronosticando la incidencia que tendrán en la industria que sustenta los tráficos del puerto avilesino los datos de evolución de la economía.
Así, la previsión del Plan de Empresa apunta a un tráfico anual acumulado de 4,5 millones de toneladas para 2021. “Nunca en un Plan de Empresa se plantearon 6 toneladas, siendo la cifra habitual 5 millones”, dice Santiago Rodríguez Vega, quien confía que la mercancía general incremente su cuota de participación desde la margen derecha de la ría.
Los graneles sólidos cayeron el pasado año un 10%, frente al 6% de los graneles líquidos y el 45% de la mercancía general.