El pasado mes de junio se puso en marcha el proyecto Green and Connected Ports (Green C Ports), liderado por la Fundación Valenciaport y financiado por el Programa Connecting Europe Facility (CEF) de la Comisión Europea.
Green C Ports tiene como objetivo general proporcionar un conjunto de herramientas y tecnologías de digitalización para apoyar la sostenibilidad medioambiental de los puertos y el rendimiento de las operaciones portuarias en la red TEN-T.
Este proyecto abordará seis casos de negocio consistentes en prototipos y pruebas piloto que serán implementados en diferentes puertos europeos y que servirán de base para testear tecnologías innovadoras como el IoT, big data o el análisis predictivo mediante modelos de inteligencia artificial.
Prototipos y pilotos
El primer caso de negocio, que se realizará en el puerto de Valencia, busca integrar diferentes fuentes de información portuaria con el fin de disminuir la congestión del tráfico terrestre por carretera. En este sentido, se plantea realizar una serie de modelos de predicción que permitan determinar la fecha y hora de entrada y salida de los diferentes camiones que acceden al puerto. De esta manera, será posible conocer con cierta precisión si habrá o no congestión en una determinada fecha y hora futura.
El segundo caso de negocio tiene como objetivo anticipar los problemas de acceso marítimo que tiene el puerto de Venecia, debido a ciertas condiciones meteorológicas adversas como por ejemplo la marea, el viento o la niebla. Se trata de realizar modelos predictivos que permitan anticipar posibles cierres de este puerto italiano, informando de ello a los buques y clientes afectados.
Por su parte, los casos de negocio 3 y 4 pretenden mejorar la calidad del aire y el ruido tanto en el puerto griego del Pireo como en el de Valencia. Para ello, se desplegarán una serie de sensores, cabinas meteorológicas, cámaras espectográficas y otros equipos, con el fin de identificar, de forma temprana, mediciones superiores a ciertos niveles de tolerancia con el objetivo de informar a las autoridades portuarias para que éstas puedan tomar ciertas decisiones que permitan mitigar dichos impactos.
Asimismo, el quinto caso de negocio evaluará, en los puertos alemanes de Bremerhaven y Wilhemshaven, los impactos negativos de la agitación de las olas, las corrientes y el viento en la productividad de las grúas buque-a-tierra (STS). A través de un modelo predictivo se integrarán diferentes fuentes de información con el fin de anticipar, hasta con 48 horas de antelación, posibles caídas en el nivel de servicio por cuestiones meteorológicas. En este sentido, la gestión y comunicación de esta información permitiría a los capitanes de los diferentes buques poder ajustar su velocidad durante la navegación evitando hacer escala en aquellos momentos del día en los que se prevé que existan condiciones adversas.
Finalmente, el sexto y último caso de negocio permitirá la medición de emisiones en tiempo real a lo largo de una cadena de transporte multimodal completa en las rutas que conectan Barcelona, Valencia y Palma de Mallorca. La prueba piloto permitirá determinar de forma exacta qué huella de carbono ha generado un determinado equipamiento, ofreciendo a los diferentes cargadores una transparencia completa de sus operaciones de transporte, de forma que estos puedan optar por aquellas cadenas logísticas con un menor impacto medioambiental para sus productos.
En definitiva, este proyecto reducirá el impacto de las operaciones portuarias en las ciudades, controlará las emisiones de los puertos y buques y optimizará el manejo de la carga en los principales puertos europeos.
En este sentido, el proyecto promoverá enlaces de transporte marítimos ecológicos, viables, atractivos y eficientes, integrados en toda la cadena de transporte, y su aplicación contribuirá a reequilibrar el sistema de transporte de la UE hacia un sistema más sostenible.
La reunión de arranque del proyecto tuvo lugar en Valencia el pasado 26 de junio.