Asimismo, cabe destacar que el 13% de las mercancías que entran o salen del Puerto de Baiona se transportaron en tren, lo que supone un récord en los últimos 10 años y muestra el resultado de los esfuerzos de sus gestores para promover el cambio modal, en particular con el creación del Operador Ferroviario de Proximidad de Sudoeste, cuyo tráfico ha aumentado en un 60% con respecto a 2018 hasta las 160.000 toneladas. Así, el tráfico ferroviario aumentó un 40%, pasando de 229.000 a 319.000 toneladas.
En cuanto al balance de actividad, cabe reseñar que aquellas industrias que llevan establecidas durante mucho tiempo en el puerto han resistido bien el contexto económico aún no del todo favorable y han reiterado su voluntad de invertir en 2019, o de plasmar los resultados de las inversiones realizadas en los últimos meses. Así, los clientes del puerto vascofrancés están anunciando previsiones de tráfico positivas que deberían permitir un crecimiento continuo en los próximos años para alcanzar rápidamente el hito de los 3 millones de toneladas.
Siderúrgicos
Tras un período de puesta en marcha que duró varios meses, Laminoir des Landes inició su actividad y los primeros buques de importación mostraron un aumento de la actividad del 33%. La compañía espera alcanzar este año un tráfico de 150,000 toneladas.
Por su parte, la siderúrgica Celsa, cuando complete su proyecto recuperará el hito del millón de toneladas en comparación con las 750.000 producidas en los últimos años y favorecerá una política de transporte de materia prima que priorice los suministros marítimos y ferroviarios.
Mientras tanto, la terminal de graneles líquidos de Alkion cerró el ejercicio 2018 con un fuerte aumento en los volúmenes de hidrocarburos refinados hasta alcanzar 125.000 toneladas (+ 81,49%), así como los suministros de betún. Mientras tanto, los productos químicos experimentaron un descenso del 14%, que debería recuperarse en 2019.
Agroalimentarios
En cuanto al tráfico de productos agroalimentarios, hay que destacar que la mala meteorología en las últimas campañas ha afectado a los tráficos agroalimentarios, que, sin embargo, consiguieron resistir con una reducción del 4,4% en el maíz, los fertilizantes y la nutrición animal.
Por último, en el cómputo total de los tráficos,la palanquilla fue la primera mercancías en Baiona en 2018 con un total de 526.512 toneladas y un descenso del 1,04%, mientras que los fertilizantes fueron la segunda en volumen con 494.269 toneladas, y una bajada del 2,65%.