marítimo · Álvaro Rodríguez Dapena, presidente del Organismo Público Puertos del Estado (OPPE)
“El siguiente paso será la integración digital smart port-smart city”
Álvaro Rodríguez Dapena, presidente de Puertos del Estado.
Los puertos españoles han asumido con brío y con un alto grado de responsabilidad el compromiso de dar un giro de 180º a las relaciones entre los puertos y las ciudades. Para analizar de forma exclusiva los retos y desafíos de esta especial vinculación, el presidente del Organismo Público Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena, ha atendido a Diario del Puerto Plus.
Madrid. Para el presidente de Puertos del Estado, la clave de las relaciones puerto y ciudad está, en primer lugar, en la coordinación entre Administraciones.
Señor Rodríguez Dapena, ¿cuál es a su juicio el grado de responsabilidad que deben adquirir las autoridades portuarias, no ya sólo para una perfecta convivencia entre las actividades portuarias y la ciudad, sino para la integración del mar con la ciudad?
La aprobación del Marco Estratégico del sistema portuario de interés general en octubre de 2022 supuso poner en pie de igualdad la dimensión social de los puertos, junto a las dimensiones económica y ambiental. Se viene a reconocer así la necesidad de un refuerzo del compromiso de los puertos de interés general con sus ciudades.
De este refuerzo han de desprenderse acciones efectivas para poner en valor aquellos espacios portuarios que puedan abrirse a los ciudadanos, muchos de ellos con una importante centralidad urbana, con el fin de elevar su calidad de vida. También debe propiciarse la coordinación de servicios portuarios-municipales.
Con todo, en la práctica, la responsabilidad en los ámbitos de integración puerto-ciudad, es compartida entre las autoridades portuarias y las entidades locales, y por tanto, ambas administraciones necesariamente tienen que trabajar de manera conjunta en esta materia.
Entonces, a partir de las políticas que ya están desarrollando los puertos, ¿cuáles son ahora mismo los principales obstáculos para lograr una relación armónica entre puerto y ciudad?
Dada la singularidad de cada uno de los puertos y las ciudades en las que se encuentran, no se puede hablar de obstáculos genéricos. Aunque el objetivo final de elevar la calidad de vida del ciudadano es compartido, el camino para lograrlo es propio de cada proceso. Las condiciones de contorno del trinomio costero-urbano-portuario obligan a adoptar soluciones ad hoc. Habrá, pues, casi tantas formas de mejorar los frentes marítimos urbano-portuarios como puertos.
Con carácter general es posible reconocer obstáculos en los planos de ordenación física y también funcional, desde las perspectivas económica, jurídica, ambiental y estética. Desde nuestra posición, tales obstáculos han de resolverse por medio de planes y proyectos específicos, caso por caso, bajo la premisa del diálogo constructivo interinstitucional y social.
¿Y cómo cree que deben mejorar estas relaciones entre puertos y ayuntamientos?
Como he dicho, la coordinación entre ambas instituciones es indispensable. En el Marco Estratégico tenemos una línea denominada “Puertos comprometidos con su ciudad”, que refleja claramente un compromiso de los puertos para con sus ciudades. Pero ese compromiso debe ser recíproco. Si cualquiera de las partes falla, será imposible avanzar.
En este sentido y dentro de la línea estratégica citada, a efectos de impulsar nuevos proyectos de interacción puerto-ciudad impulsores de un desarrollo justo y sostenible, nos hemos propuesto que para 2025 todas las Autoridades Portuarias tengan constituido un foro técnico permanente entre cada una de ellas y las respectivas Administraciones locales, de forma que se canalice ese diálogo interadministrativo necesario para poner en práctica los citados proyectos.
Además, no podemos dejar de lado la relevancia de una coordinación en materia de servicios portuarios-municipales como son el abastecimiento de agua y energía, el saneamiento, el control y valorización de residuos, la optimización de los niveles de servicio asociados a la movilidad urbano-metropolitana o los procesos de digitalización.
Son temáticas que exigen estrechar las líneas de colaboración directa entre las administraciones portuaria y local.
¿Cree que la ciudadanía valora el esfuerzo de las autoridades portuarias en la integración puerto y ciudad, o cree más bien que como mínimo existe un gran desconocimiento, incluido que las inversiones las está acometiendo el propio puerto?
Tengo la impresión de que los puertos de interés general van siendo percibidos por la ciudadanía como dinamizadores de la economía y creadores de empleo, aunque quizás resulte todavía desconocido el hecho de estar la autoridad portuaria detrás de numerosas inversiones destinadas a mejorar los espacios urbano-portuarios disfrutados por los propios ciudadanos.
Nuestro trabajo es, en este sentido, conectar mejor con ellos y comunicar de manera efectiva todos los proyectos e iniciativas en los que estamos inmersos y comprometidos.
A tal fin, nos hemos planteado como objetivo estratégico reforzar la visibilización del puerto en sus ciudades mediante los oportunos planes y campañas de comunicación y difusión local para impulsar el reconocimiento generalizado de la contribución económica y social del puerto, apoyado en los pertinentes estudios de impacto.
¿Cuál debe ser la directriz a seguir en el ámbito de la titularidad del dominio portuario? ¿Deben cederse íntegramente espacios a la ciudad? ¿Debe mantener el puerto la titularidad para garantizar los fines a los que está destinado? ¿Debe tener siempre una función o intención marítimo/portuaria todo lo que se desarrolle en esos espacios?
Como decía anteriormente, no existe una regla general para aplicar a todos los casos. La realidad es que hay una multiplicidad de situaciones diferentes que deben ser afrontadas pormenorizadamente y de manera específica.
Por un lado, son muy ilustrativos los casos de éxito en los que la regeneración del frente urbano-portuario ha permanecido dentro de la zona de servicio de los puertos. Se pueden citar en este bloque el Port Vell de Barcelona, el Muelle 1 de Málaga, el frente portuario de Santander y un largo etcétera. El hecho de ubicarse en zona de servicio portuario las operaciones de integración puerto-ciudad otorga estabilidad y sostenibilidad a medio y largo plazo a las soluciones que puedan plantearse de regeneración urbano-portuario.
También hay situaciones con éxito en las que se produce la desafectación del dominio público y la cesión a la ciudad en sus diferentes modalidades, como es el caso del núcleo originario del Puerto de Bilbao, por trasladarse éste al abra exterior.
La clave está en que cada proceso se apoye en acuerdos interadministrativos de amplio alcance, con sus propias especificidades, pero con un fin común centrado en la utilidad social del proyecto ante la ciudadanía.
¿Qué es aquello que están haciendo los puertos españoles en materia de puerto y ciudad que no es sólo muy positivo sino que debe de servir de ejemplo a nivel mundial?
En realidad, el sistema portuario de interés general es ya un referente internacional en esta materia, no sólo desde el punto de vista de desarrollo urbano abierto, sino también desde el punto de vista del medio ambiente, de mejora de la accesibilidad en el entorno urbano y, por supuesto, en términos de preservación y aportación cultural.
Como comentaba anteriormente existen numerosas actuaciones finalizadas, en ejecución o en marcha.
A modo de ejemplo y centrándonos en algunas de las más actuales, cabe citar la regeneración que se ha hecho en el puerto de Huelva, la que se está realizando en el Paseo Marítimo de Palma de Mallorca, dotando de espacios exclusivamente para el disfrute ciudadano, la reordenación de los espacios junto al Llano Amarillo en el puerto de Algeciras, las actuaciones en la Avenida Alfonso XII y aledaños en Cartagena o la operación de regeneración de Valleseco en Santa Cruz de Tenerife, además de otras que se han enfocado más en la recuperación de patrimonio industrial, como el Cable Inglés de Almería o el Cargadero de Mineral de Melilla.
¿Qué es aquello en lo que los puertos españoles aún deben mejorar claramente en materia de la relación puerto y ciudad?
Debemos seguir avanzando en la coordinación entre administraciones y, para ello, es indispensable trabajar en los objetivos que nos hemos planteado en este sentido en el Marco Estratégico.
A tal efecto, cabe citar el desarrollo de plataformas digitales que agilicen y hagan más eficaces la prestación de servicios portuario-municipales; constituir foros puerto y ciudad para la mejora urbanística; y crear un listado de planes y proyectos de regeneración con un seguimiento de su avance y situación. Además, seguiremos avanzando en nuevos retos y el siguiente paso será la integración digital “smart port-smart city”.
¿Hasta qué punto influye la bonanza portuaria y la disponibilidad presupuestaria en las políticas relativa al ámbito de puerto y ciudad? ¿El acotamiento de las tasas y racionalidad en los ingresos en los próximos años pueden tener alguna influencia?
La dimensión social es de vital importancia para los puertos, por tanto, se recoge en un capítulo presupuestario que, bajo la concepción de “puertos para y por las personas”, deja patente el obligado compromiso de las Autoridades Portuarias con sus ciudades adyacentes.
En ese sentido, según la planificación para los próximos años, pese a una contención de las tasas portuarias, las Autoridades Portuarias cuentan y contarán a futuro con recursos suficientes como para atender las inversiones programadas en todos los capítulos presupuestarios, incluyendo, claro está, el relativo a las actuaciones en materia de integración puerto y ciudad.
Como ya he señalado anteriormente en esta entrevista, son actuaciones que han de planificarse con criterios de excelencia teniendo en cuenta las perspectivas de estética, de funcionalidad y de viabilidad. Para este tipo de actuación “puerto y ciudad” tenemos un capítulo previsto en los actuales Presupuestos Generales del Estado para el periodo 2022-26 que asciende a 286 millones de euros en el conjunto del sistema portuario de interés general.
Debemos seguir avanzando en la coordinación entre administraciones y, para ello, es indispensable trabajar en los objetivos que nos hemos planteado en este sentido en el Marco Estratégico
Nos hemos propuesto que para 2025 todas las Autoridades Portuarias tengan constituido un foro técnico permanente entre cada una de ellas y las respectivas Administraciones locales
“Debemos velar para minimizar afecciones de los cruceros a la ciudad”
Uno de los tráficos de mayor interacción entre el puerto y la ciudad son los cruceros. A este respecto, el empeño de un puerto en el impulso del tráfico de cruceros, ¿debe ser directamente proporcional al interés de la ciudad en los cruceros o debe ejercer el puerto algún tipo de autoridad o influjo en la defensa de este tráfico de acuerdo con su consideración de lo que es bueno para la ciudad?
Los puertos somos una herramienta para generar impacto económico en el territorio, y con carácter general las ciudades lo apoyan. Máxime en un tráfico tan representativo como es el de los cruceros. A partir de aquí es obvio que la actividad crucerística ha de compatibilizarse con la de la ciudad, en términos de movilidad y de sostenibilidad ambiental. De nuevo se remarca el diálogo como clave, dentro de las condiciones de contorno en que se mueve cada Administración.
En el caso del sistema portuario, dada su condición de interés general, estamos obligados a atender las peticiones de escalas que se nos soliciten, en la medida de la capacidad y recursos disponibles, a la par que debemos velar para minimizar afecciones a la ciudad. Y ahí es importante avanzar coordinadamente en el ámbito del sector público y además con el propio sector crucerístico.
“La RSC con las ciudades debe hacerse de manera ordenada”
¿Hasta dónde debe llegar la implicación de la autoridad portuaria con la ciudad en materia de ayudas, subvenciones y demás partidas para asociaciones culturales, deportivas, sociales...?
Es importante que la Autoridad Portuaria ayude, contribuya y fomente la responsabilidad social corporativa de los puertos con las ciudades, pero debe realizarse de manera ordenada, sobre la base de acuerdos o convenios no solo con las oportunas autoridades locales y comarcales, sino también con los principales grupos de interés del entorno, de forma que funcione conforme a unas reglas de juego transparentes, objetivas y proporcionadas.
“El sistema portuario tiene capacidad y solvencia para continuar mejorando en todos los aspectos”
-¿Hasta qué punto la vistosidad e impacto ciudadano de las políticas de puerto y ciudad pueden llevar a los gestores portuarios a concentrar menos esfuerzos en las labores esenciales de la actividad y gestión portuaria?
Considero que el refuerzo de las dimensiones social y medioambiental de los puertos, que mencionaba al inicio y donde hay un importante camino por recorrer, no lleva, ni mucho menos, a descuidar la tradicional dimensión económica.
En el Marco Estratégico se definen 16 líneas estratégicas que abordan todos los aspectos desde unos criterios de actuación preferentes como son la eficiencia, conectividad, digitalización, innovación, sostenibilidad, seguridad y transparencia.
El sistema portuario tiene capacidad y solvencia para continuar mejorando en todos los aspectos estratégicos y para disponer el desarrollo de los puertos que nos hemos propuesto de aquí a 2030.