Celsa France está ubicada en el Puerto de Baiona, a aproximadamente 1,5 kilómetros de la desembocadura del río Adour. en un emplazamiento "inmejorable", a juicio de la empresa, ya que dispone de vías de comunicación que permiten el transporte marítimo, terrestre y ferroviario tanto de la chatarra que se compra como de las palanquillas que se venden.La nueva planta de Celsa encaja en los proyectos industriales y logísticos diseñados en el Plan de Acción del puerto, y contribuye a alcanzar sus objetivos medioambientales, de incremento de los tráficos portuarios, de valor añadido y empleo.Para el Puerto de Baiona es de vital importancia atraer nuevas actividades industriales y logísticas que generen tráficos tras la marcha de dos importantes industrias como Refinerías du Midi y Celanese, que dejaron de mover un millón de toneladas entre 2007 y 2009. Por ello, el proyecto de Celsa "es una verdadera oportunidad para el puerto y la economía regional".