Reactivar la economía, generar puestos de trabajo y potenciar las oportunidades de los ciudadanos de la provincia son los tres ejes fundamentales que el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, quiere conseguir con la declaración de una Zona Franca en el Puerto Alicante. “Queremos que Alicante sea puerta de Europa en el Mediterráneo, reactivar la economía, generar puestos de trabajo y que la gente tenga más oportunidades”, explica el presidente de la Diputación, “pretendemos liderar este trabajo conjunto, en equipo, pensando en el bienestar de las personas que viven en la provincia. El empleo es una prioridad y tenemos que aunar esfuerzos para poner en marcha proyectos interesantes que nos conviertan, más si cabe, en un territorio atractivo en el mundo y líder en oportunidades”. La Zona Franca en el Puerto de Alicante concentrará a empresas nacionales e internacionales que generen un dinamismo importante desde el punto de vista económico y turístico. Esta propuesta institucional conllevará, entre otras acciones, la creación de un centro logístico empresarial ligado a la terminal marítima alicantina. “Tenemos en el Puerto una posible zona de ampliación y otras áreas cercanas a él susceptibles de formar parte de este centro logístico empresarial que podría concentrar a empresas nacionales e internacionales. Hay que aprovechar toda la potencialidad de la provincia”, subraya el presidente de la Diputación.EstudioMientras inicia una ronda de contactos para presentar el proyecto a los agentes económicos de la provincia, la Diputación ha solicitado ya la elaboración de un informe que analice la viabilidad y competitividad que supondría la creación de una Zona Franca en el Puerto de Alicante a INECA (Instituto de Estudios Económicos de la provincia de Alicante).
El objetivo es convertir la provincia de Alicante en un territorio inteligente y de oportunidades con un área estratégica conectada a la terminal alicantina que potencie su valor estratégico, fomente el desarrollo mercantil y consiga un incremento económico y turístico en el territorio, explicaron desde la Diputación. Por ello, el estudio encargado al instituto será “sosegado, riguroso y serio”.Las conclusiones de este estudio de impacto económico se presentarán en un plazo máximo de dos meses. El documento analizará, entre otras cuestiones, la evolución de la actividad exterior de las mercantiles alicantinas, la disponibilidad de suelo industrial, el concepto jurídico-tributario de la zona franca y su delimitación, así como las ventajas fiscales de estas áreas, su funcionamiento y estimación de beneficio. También valorará la conexión intermodal de mercancías desde la provincia al sureste peninsular, los atractivos de la zona franca para el usuario, los movimientos de pasajeros, las ubicaciones complementarias y alternativas, además de la estimación de inversión necesaria y del incremento de la actividad empresarial que generaría el proyecto. INECA espera que en el proyecto se implique a los 50 socios del instituto que representan a unas 400 entidades, con 32.000 trabajadores y una facturación de 2.600.000 euros.Mientras se elabora el mencionado informe, Sánchez ha planteado la posibilidad de incluir a la Ciudad de la Luz en esta zona logística, abriendo el complejo a empresas de base tecnológica. “En torno al Puerto de Alicante hay un espacio logístico único integrado por la OAMI, el aeropuerto o el futuro Corredor Mediterráneo, en el que también podríamos incluir a la Ciudad de la Luz, pudiendo, de esta forma, dar solución a la situación que atraviesa este complejo, convirtiéndolo en una oportunidad para esta ciudad y para toda la provincia”, ha destacado el presidente, quien ha calificado estas instalaciones “como el escenario idóneo para acoger empresas logísticas y de base tecnológica”, si finalmente no se destina al ámbito cinematográfico, que se beneficiarían de este espacio libre de impuestos y con un régimen fiscal especial.Ronda de contactosPor otro lado, como señalan desde la Diputación, este proyecto no será posible sin la cooperación de las empresas y de las administraciones. “En esta etapa de postcrisis debemos trabajar conjuntamente las distintas administraciones”. En este sentido, el presidente de la Diputación de Alicante anunció una ronda de contactos con el alcalde de Alicante y con la Generalitat Valenciana para trabajar buscando el beneficio común, porque “no tiene que haber colores políticos en este apasionante e importante proyecto”. Por el momento, Sánchez cuenta con el apoyo del secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, quien confirmó su respaldo el mismo día que se presentó la iniciativa: “La Zona Franca es un proyecto estratégico que merece la pena estudiar al tratarse de un instrumento potente, generador de riqueza y empleo. Además existen razones objetivas que se encuentran en la cercanía del aeropuerto de Alicante-Elche y la potencialidad de los polígonos industriales y del propio puerto de la ciudad”.Asimismo, Sánchez ya se ha reunido con el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, al que le solicitó establecer una mesa de trabajo con el objetivo de llegar a acuerdos sobre la Zona Franca; y con el ya expresidente de la Autoridad Portuaria de Alicante, Juan Ferrer. “Si un puerto tiene dinamismo, fuerza y volumen de tráfico comercial y turístico genera bienestar y empleo. Por ello el Puerto de Alicante es un pilar fundamental de nuestra economía”, recordó Sánchez en su encuentro con Ferrer.