En la última década, la demanda global de cruceros ha crecido un 77%, pasando de 12 a 21,3 millones de pasajeros. ¿Hay techo para este crecimiento? ¿Dónde lo sitúa CLIA?Año tras año, la industria continúa mejorando sus cifras. De hecho, para este año estimamos que 23 millones de pasajeros se embarcarán en un crucero. Este aumento de cruceristas pone de relieve los continuos esfuerzos que hace la industria para diversificar y ampliar todavía más su oferta. Por ejemplo, este año 22 nuevos barcos con una inversión de más de 3.550 millones de euros se sumarán a la flota de CLIA, que cuenta ya con 421 barcos en activo. Con estos nuevos barcos, se ampliará el número de camas hasta alcanzar las 502.000.
La aportación de la industria crucerística a la economía mundial, incluida la europea, crece año tras año. ¿Qué previsiones maneja CLIA para el actual ejercicio?Para este año prevemos un fuerte crecimiento de la industria de cruceros, ya que está desempeñando un papel cada vez importante en el crecimiento económico de las comunidades portuarias de todo el mundo. Sólo en 2013, la industria generó un impacto económico global de 103.000 millones de euros y más de 891.000 puestos de trabajo en todo el mundo.
¿Qué representa en la actualidad Europa para el sector de cruceros a nivel mundial? ¿Y la industria crucerística para Europa?Europa es un mercado clave para el sector de los cruceros, ya que es el segundo mercado más importante del mundo. Cada vez más europeos eligen un crucero a la hora de planificar sus vacaciones. En 2013, 6,4 millones de europeos reservaron un crucero, pero además, el impacto económico que deja la industria en el continente (39.400 millones de euros) y más de 330.000 puestos de trabajo, también refleja el peso que tiene la industria en el crecimiento económico europeo.
Aunque el Caribe es, indudablemente, el destino rey para el sector, ¿ha seguido el Mediterráneo recortando distancias en el último año?Es cierto que el Caribe cuenta con unas ventajas estacionales que garantizan su liderazgo durante todo el año, pero el Mediterráneo está atravesando un gran momento y tiene todavía un elevado potencial de crecimiento. No hay que olvidar que es el segundo destino de cruceros más importante del mundo. Además, la industria se está reinventando para reducir su estacionalidad y para que el Mediterráneo se convierta en el epicentro de los cruceros de invierno, como quedó patente en el congreso "Seatrade Winter Cruising Forum", celebrado el pasado mes de enero en Cartagena (Murcia). Para acelerar este crecimiento es necesario continuar promocionando los destinos enfocados en el turismo de invierno, incluir tours y excursiones adaptados a los diferentes tipos de viajeros, así como tomar muy en cuenta las necesidades de las navieras de cara a que contemplen la extensión de la temporada alta o para incrementar su presencia en temporada baja.
Además de sus indudables atractivos, Europa tiene que promocionar otros aspectos para seguir por encima de destinos emergentes que se están posicionando con fuerza. ¿Tiene CLIA Europa alguna idea al respecto?Efectivamente, aunque el número de europeos que se decanta por un crucero es cada vez mayor, es cierto que en algunos mercados el conocimiento de los consumidores sobre este producto a veces es limitado. Por este motivo, vamos a seguir trabajando para promocionar este producto tanto entre los europeos como en otros mercados para que conozcan la variedad de servicios, destinos y rutas que ofrece este sector en Europa. Además, trabajaremos con las comunidades portuarias para que sigan el ritmo de crecimiento de la industria y maximicen las oportunidades para todos. Otro tema fundamental es el de los visados. Sobre este tema, es necesario que se implementen más acciones para atraer a los turistas a Europa y aprovechar mercados potenciales en crecimiento como pueden ser China, Rusia o la India. También es necesario abordar el asunto de las escalas de cruceros en sitios históricos. Como industria, estamos comprometidos con las autoridades y los diferentes grupos de interés para encontrar soluciones viables y sostenibles en los entornos que además puedan maximizar las oportunidades de crecimiento para todos.
Una de las líneas estratégicas en las que CLIA hace más hincapié es el refuerzo de su relación con los puertos y destinos y la entrada de éstos en la asociación. ¿No puede esto causar un cierto malestar a otras asociaciones que engloben únicamente a puertos?Consideramos que todos los esfuerzos que se hagan en beneficio de la industria son positivos y complementarios. En este sentido, CLIA reconoce y valora el papel de las asociaciones de puertos en el desarrollo de nuestro sector. Y es que los puertos son una parte fundamental y todo lo que facilite la colaboración entre puertos para la promoción regional y la modernización de la infraestructura portuaria redundará en el beneficio de todos.Por nuestra parte, la misión de CLIA no es sólo representar a las compañías de cruceros sino a toda la industria crucerística mundial. Muchos de los retos a los que se enfrentan los puertos como las estacionalidad de la demanda, la implantación de nuevas normativas en asuntos medioambientales, de seguridad, de inmigración, etc, o las necesidades de inversión para adaptarse a los nuevos perfiles de cruceristas, se salen en nuestra opinión del ámbito puramente portuario y precisan de una respuesta de "Sector" que sólo CLIA puede liderar.Hay que tener en cuenta también que CLIA representa a 63 compañías de cruceros que suponen el 95% de la flota mundial y casi el 100% de los barcos que navegan por nuestras costas. Las posibilidades de promoción de puertos y destinos ante estas navieras son inmejorables a través de la organización de eventos sectoriales, conferencias, etc, que realizamos en todo el mundo en colaboración con nuestros socios. De hecho, muchos puertos en el mundo ya se están beneficiando de estas acciones para dar a conocer sus destinos de forma fácil y efectiva ante los principales "decision makers" del sector.Dicho esto, apreciamos enormemente la labor que efectúan las asociaciones de puertos existentes. No debemos olvidar que, en ciertos ámbitos, los intereses de las navieras y de los puertos pueden divergir. Por ello es necesario que los puertos dispongan de asociaciones y plataformas propias para representar sus propios intereses. Cada asociación ofrece diferentes beneficios a sus miembros y, en este sentido, los puertos son libres de formar parte de una o más asociaciones dependiendo de sus intereses y necesidades.
¿En qué aspectos quieren trabajar este año esta relación entre CLIA y los destinos?CLIA continuará trabajando para estrechar su relación con los destinos. Y es que la experiencia en tierra es fundamental para los cruceristas, que en algunos casos piden estar más horas en las ciudades que visitan y que dejan además un importante desembolso económico. Hay que destacar además que, en muchos casos, una primera visita a estas ciudades, abre la puerta a que los cruceristas vuelvan durante más días a estos destinos.
La primera cumbre Port & Destination Summit se celebró en septiembre en Barcelona y se anunció la intención de CLIA de celebrar una segunda edición. ¿Dónde y cuándo tendrá lugar?La próxima European Port & Destination Summit tendrá lugar el 8 de septiembre en Hamburgo (Alemania).
¿Qué puntos débiles detectaron en la relación entre navieras y puertos a raíz de esa primera cumbre?Esta cumbre puso de manifiesto la necesidad que había de establecer una plataforma en la que la industria pudiese intercambiar ideas para encontrar soluciones a los desafíos que tiene por delante y para poder seguir creciendo de forma conjunta. Entre los principales temas que se discutieron y que continúan en la agenda figuran la infraestructura portuaria, el desarrollo de destinos o la planificación de itinerarios. Es cierto que algunas instalaciones del Mediterráneo no van a la par con el crecimiento experimentado por la industria y la clave para la solución reside en que la colaboración entre puertos y destinos sea más estrecha. Como decía anteriormente, entre los retos a los que se enfrentan los puertos están la estacionalidad, las nuevas normativas o la necesidad de una inversión constante para adaptarse a la demanda. Y aquí CLIA desempeña un papel clave como representante de los intereses de toda la industria en su conjunto y como "facilitador" entre puertos y navieras para que éstos puedan dar a conocer sus infraestructuras y sus destinos y para que las compañías les hagan llegar sus necesidades.