Esta oferta, que pretende ser una alternativa real frente a otros puertos competidores, se basa "en una oferta económica interesante, una oferta técnica y un producto, es decir, un destino", ha explicado a este Diario Josep Andreu, presidente del Puerto de Tarragona.Por el momento, las sensaciones que los representantes del enclave han tenido durante los contactos que han mantenido con diferentes navieras en Miami, han sido positivas. "Hemos notado una buena aceptación por parte de las navieras, que ven este cambio como algo nuevo, más atractivo", añade Andreu.Este año, el Puerto de Tarragona cerrará el ejercicio con entre ocho y diez escalas, pero sus responsables esperan incrementar estas cifras en ejercicios futuros porque "hemos abierto puertas y nuevas posibilidades que creemos son interesantes", añade el presidente del enclave.Esta nueva etapa de Tarragona en la promoción como destino crucerístico se basa en "poner en valor la propuesta del territorio en su conjunto", incluyendo atractivos como las playas, la arquitectura, la historia, el parque temático Port Aventura, rutas temáticas gastronómicas o relacionadas con el mundo del vino y la cercanía con la ciudad Barcelona y su entorno.