Con el recrecido del dique en los 400 metros iniciales, se reducen considerablemente los rebases de agua en el caso de temporales, y se incrementan los días útiles de la explotación de las instalaciones. La obra, que ha supuesto una inversión de 1,534 millones de euros, ha consistido en la demolición de los primeros 400 metros del espaldón existente y su reconstrucción con hormigón armado hasta los 10 metros de altura. Para ello, se han utilizado barras de poliéster reforzado con fibra de vidrio (PRFV) en la cara expuesta al oleaje. Se trata de un material que se caracteriza por presentar un mejor comportamiento que el acero frente a la corrosión y porque en la actualidad, es una de las mejores soluciones que ofrece el mercado para estructuras de hormigón armado que se encuentran en zonas costeras o ambientes marinos. La obra se ha completado dotando la zona con iluminación LED, mejorando la visibilidad y facilitando las operaciones portuarias nocturnas. Los trabajos fueron adjudicados por el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria a la empresa Espaldón de Escombreras, U.T.E. El dique Suroeste actúa “de abrigo” de los muelles de la dársena de Escombreras. Tiene 1.000 metros de longitud y 26 metros de calado. El presidente de la Autoridad Portuaria, Joaquín Segado, ha asegurado que esta obra “mejora la operatividad del puerto en los días de temporal” haciendo más productiva la zona en jornadas de fuerte lebeche. Son inversiones que según Segado permiten al Puerto “seguir generando empleo y riqueza”. El presidente de la Autoridad Portuaria ha querido visitar el dique tras la finalización de las obras del espaldón, quien ha destacado la importancia de las inversiones en la productividad del Puerto de Cartagena, que se ha situado en julio en el primer Puerto en volumen de importación de España.