Como consecuencia de la resolución del expediente, la Autoridad Portuaria de Alicante presentará en el plazo de 30 días el diseño del proceso constructivo de naves cerradas y en depresión para la manipulación de graneles y el cronograma de su ejecución, en su caso, así como un nuevo proyecto de explotación y control de las emisiones generadas por la manipulación de graneles.A este respecto, la Conselleria ha acogido de buen grado la decisión de la Presidencia del Puerto de Alicante de convocar el viernes un Consejo de Administración extraordinario para activar la tramitación definitiva de la adjudicación y construcción de las naves, tal y como informó este Diario.Al mismo tiempo, desde la Generalitat valenciana se está trabajando de forma colaborativa y conjunta con las partes implicadas para garantizar el restablecimiento de la actividad del puerto sin que se ocasionen molestias a los vecinos de Alicante.Para el Consell, "el Puerto de Alicante es un referente de la actividad económica y comercial de la Comunitat Valenciana. Por ello, velará por que la actividad portuaria pueda continuar con el desarrollo habitual de sus operaciones, supeditada a que se reduzca el impacto sobre la calidad del aire que puede derivarse de la presencia de partículas en suspensión generadas por las operaciones de carga y descarga de graneles". De este modo, se facilitará el periodo transitorio hasta que se construyan las naves cerradas, siempre que el puerto cumpla con los requisitos establecidos por la conselleria y refrendados por el auto judicial.Asimismo, la conselleria intensificará el seguimiento del cumplimiento de los acuerdos alcanzados y las condiciones establecidas en el trasiego de graneles en el puerto alicantino para que no se ocasione ninguna molestia a los vecinos e incrementará los controles de calidad del aire en la zona.