Esta empresa española construirá una terminal independiente para el almacenamiento, mezcla, transformación, carga y descarga de graneles líquidos. Losada ofreció varios datos sobre este proyecto que supone un importante punto de inflexión en el avance de la actividad comercial en el puerto exterior, donde los graneles líquidos constituyen un sector estratégico. En este sentido, recordó que la implantación de estas instalaciones no sólo supondrá importantes tráficos e ingresos adicionales, sino que también constituye un aval de las buenas perspectivas que se generan en torno al Puerto Exterior. La instalación, en cuya ejecución Deep Water invertirá alrededor de 30 millones de euros, ocupará unos 45.000 metros cuadrados, con posibilidad de ampliaciones futuras. Constará de un total de nueve tanques de almacenamiento con capacidad para 347.000 metros cúbicos. En esta terminal, que se estima estará operativa en 2019, podrá operarse desde petróleo hasta nafta, gasolina, queroseno, diésel, gasóleo, biodiesel, fuelóleo, lubricantes o líquidos oleosos. Esta terminal se sumará a la de Repsol, que ya está operando con todos sus graneles sólidos (coque y azufre) y ha iniciado los trabajos para construir su pantalán, con la previsión de trasladar el movimiento de petróleo crudo a Langosteira el próximo año.